MEDIO AMBIENTE: LA PLATA

Lo harían al menos una vez por semana

Acusan a la Delegación de Los Hornos y de Arana de arrojar residuos en 160 y 607

Por Fernando Tocho, de la Redacción de NOVA.

 

Decir que la región de Arana tiene muchas falencias y múltiples inconvenientes, no es ya una novedad. En ese marco ya se ha denunciado por los vecinos, la presencia de asentamientos, la ausencia de luminarias, asfalto, obras hidráulicas y señal para las comunicaciones. A todo este escenario, se le suma un problema más.

En diálogo con NOVA, vecinos de la zona manifestaron que se han visto camiones de la delegación de Los Hornos y de Arana, que llegan al lugar y arrojan residuos no habituales en un campo ubicado en 160 y 607, al menos una vez por semana,  según relataron las fuentes consultadas.

Ante este escenario, existe otro proceder irregular por parte del municipio. Los vecinos denunciaron que a sabiendas de que en los campos existen grandes invernáculos aptos para el cultivo, los empleados del municipio de Arana y de Los Hornos estarían quemando los residuos que arrojan en el lugar.

Esto puede resultar peligroso para los habitantes, porque el material que se encuentra allí, puede hacer contacto con el fuego y generar incendios de gran envergadura. En esa línea, los incendios también afectan al medio ambiente, haciendo que el aire de la zona resulte perjudicial para los vecinos. Continuando con la línea de reclamos, se aseguró también que de seguir con estos problemas de higiene en la zona “nos van a comer las ratas”, dijo una fuente vecinal a NOVA.

Vale recordar que las quejas vecinales se dan en un marco en el que los habitantes de distintas zonas, han fundado la llamada Unión de Vecinos de La Plata. Considerando a este gran paso que se dio la semana pasada, los pedidos por una mejora en la calidad de vida se fortalecen y potencian, con mucho más énfasis. Aún así, muchos habitantes temen salir a hablar en forma pública, argumentando que no quieren ser amenazados por personas allegadas a la actual gestión municipal.

En conclusión, mientras los vecinos se organizan y reclaman, también tienen miedo y por lo pronto, los problemas de Arana están lejos de solucionarse.