UN CASO QUE NECESITA RESPUESTAS
A 11 días del crimen de Candela, hay más dudas que certezas
Un testigo que brindó datos en el caso, identificado como Pedro, denunció que a su declaración judicial "le agregaron cosas" que nunca expresó. En tanto, Carola Labrador no reconoció como pertenencia de su hija un abrigo secuestrado en la casa de Hugo Bermúdez Rodríguez, detenido como presunto autor material del crimen. CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) Hace 11 días que murió Candela Sol Rodríguez (la autopsia determinó que el deceso ocurrió 36 horas antes del descubrimiento del cadáver, hallado el miércoles 31/08 en un baldío de Villa Tesei) y en la investigación hay más dudas que certezas... En tanto, desde el Gobierno insisten en que se trata de "un caso complejo" y purgan responsabilidades.
Un testigo que brindó datos en el caso por el crimen de Candela Rodríguez, identificado como Pedro, denunció este viernes (09/09) que a su declaración judicial "le agregaron cosas" que nunca expresó y negó que haya afirmado que escuchó "rasguños en paredes y pasos en una escalera" de una vivienda, donde habría estado secuestrada la niña antes de ser asesinada.
"Lo afirmo: me agregaron cosas. Hay una foja que está dando vueltas sin la firma de nosotros. En ningún momento dijimos que había rasguños", señaló Pedro en diálogo con la prensa.
Este hombre vive en una casa pegada a la que, según consta en el expediente judicial, habría estado cautiva Candela, en la calle Charrúas 1081, de la localidad bonaerense de Villa Tesei, partido de Hurlingham.
En el testimonio de esta persona junto a la de su esposa se remarcó que escucharon rasguños, gritos de una niña y pasos en una escalera. Sin embargo, Pedro desmintió esta versión durante un reportaje publicado hoy en el diario La Nación y ratificó esta mañana su postura durante una entrevista con periodistas de algunos canales de televisión.
"Los ruidos de las escaleras eran de gente normal que sube y baja una escalera. Agrandaron el problema, y eso de los rasguños y los gritos fue una cosa agregada", aseveró Pedro.
El hombre apuntó: "Nosotros no somos ninguno testigos claves y no sabemos nada".
"Estamos hablando para desmentir y decir la verdad. No tenemos nada que ver. Yo no se nada y no tengo miedo porque estamos diciendo la verdad, porque no acusamos y apuntamos a nadie", concluyó Pedro.
# La madre no reconoció un abrigo
La madre de Candela, Carola Labrador, no reconoció como pertenencia de su hija un abrigo secuestrado ayer en la casa de Hugo Bermúdez Rodríguez, detenido como presunto autor material del crimen.
Carola participó esta mañana de un peritaje de reconocimiento de esa prenda de vestir en el Comité de Operaciones levantado por la policía bonaerense en proximidades de la comisaría de Villa Tesei, del cual participó también el fiscal del caso, Marcelo Tavolaro.
La mujer llegó pasadas las 11.00 al Comité de Operaciones y se reunió de inmediato con el segundo jefe de la policía bonaerense, Hugo Matzkin y con el fiscal Tavolaro.
Tras permanecer media hora, la madre de Candela se retiró del lugar acompañada de otra mujer a bordo de un automóvil Fiat Siena gris sin hacer declaraciones.
Minutos después, se retiró el fiscal Tavolaro, quien se limitó a explicar que Carola Labrador concurrió "a cumplir una diligencia judicial".
Fuentes de la investigación aclararon que la mujer fue citada para reconocer un abrigo hallado en la casa del detenido Bermúdez Rodríguez, en Morón, durante un allanamiento realizado la noche del miércoles tras su detención.
En ese procedimiento también fue secuestrada una camioneta Peugeot Partner bordó que está siendo peritada en busca de rastros de la niña.
# ¿"El perejil?"
Esta mañana, el carpintero Ramón Altamirano, detenido como presunto partícipe necesario en el crimen de Candela Rodríguez, pidió declarar ante la Justicia, y, según su abogado, "va decir la verdad" porque es "inocente".
El letrado defensor Matías Morla afirmó que el testigo de identidad reservada "miente" en lo que dijo sobre su cliente y la esposa, Nélida Altamirano, en relación al crimen de Candela, y consideró que son "perejiles" en la causa.
"Altamirano es un carpintero que le hicieron hacer un cerco (de la casa donde se sospecha que estuvo secuestrada la niña) y no sabe más nada", sentenció Morla en diálogo con la prensa en los departamentos judiciales de Morón.
En tanto, Morla precisó que la mujer del carpintero declarará en las próximas horas ante la Fiscalía a fin de aclarar que estuvo de viaje en Tucumán cuando sucedieron los acontecimientos del caso de la niña de 11 años.
"La están acusando de que estuvo acá cuando estaba en Tucumán y tengo pruebas contundentes como los pasajes de ida y vuelta, y una tarjeta de crédito firmada con su puño y letra que estuvo en un supermercado", aseveró Morla.
El carpintero se lo vincula de haberle llevado comida -arroz con pollo- a Candela en la casa de la calle Kiernan 992, de la localidad bonaerense de Villa Tesei, partido de Hurlingham, y además es el propietario de la vivienda de Charrúas 1081, situada en la misma zona, donde se sospechó que la nena también estuvo cautiva allí.
Cabe recordar que el miércoles pasado (07/09) y en sintonía con el Gobierno nacional, el ministro de Justicia bonaerense Ricardo Casal dijo tras una reunión con diputados de la Provincia, que la investigación por el secuestro y crimen de Candela Rodríguez "es muy compleja".
"Hemos tenido una extensa reunión con todos los detalles de la investigación, sobre los cuerpos que han trabajado y sobre otras cuestiones de diseño de la política criminal. Este caso es gravísimo; incluye la muerte de una nena de once años", declaró el ministro bonaerense tras la reunión.
En breves declaraciones a la prensa, el funcionario indicó que la investigación "es muy compleja" y por tal motivo advirtió que no iba a dar opiniones o informaciones sobre la causa.
"Lo de hoy fue una reunión informativa y se debatió sobre algunas políticas. Con reservas, cada uno ha vertido su opinión y ha sido respetada", completó Casal.
Un testigo que brindó datos en el caso por el crimen de Candela Rodríguez, identificado como Pedro, denunció este viernes (09/09) que a su declaración judicial "le agregaron cosas" que nunca expresó y negó que haya afirmado que escuchó "rasguños en paredes y pasos en una escalera" de una vivienda, donde habría estado secuestrada la niña antes de ser asesinada.
"Lo afirmo: me agregaron cosas. Hay una foja que está dando vueltas sin la firma de nosotros. En ningún momento dijimos que había rasguños", señaló Pedro en diálogo con la prensa.
Este hombre vive en una casa pegada a la que, según consta en el expediente judicial, habría estado cautiva Candela, en la calle Charrúas 1081, de la localidad bonaerense de Villa Tesei, partido de Hurlingham.
En el testimonio de esta persona junto a la de su esposa se remarcó que escucharon rasguños, gritos de una niña y pasos en una escalera. Sin embargo, Pedro desmintió esta versión durante un reportaje publicado hoy en el diario La Nación y ratificó esta mañana su postura durante una entrevista con periodistas de algunos canales de televisión.
"Los ruidos de las escaleras eran de gente normal que sube y baja una escalera. Agrandaron el problema, y eso de los rasguños y los gritos fue una cosa agregada", aseveró Pedro.
El hombre apuntó: "Nosotros no somos ninguno testigos claves y no sabemos nada".
"Estamos hablando para desmentir y decir la verdad. No tenemos nada que ver. Yo no se nada y no tengo miedo porque estamos diciendo la verdad, porque no acusamos y apuntamos a nadie", concluyó Pedro.
# La madre no reconoció un abrigo
La madre de Candela, Carola Labrador, no reconoció como pertenencia de su hija un abrigo secuestrado ayer en la casa de Hugo Bermúdez Rodríguez, detenido como presunto autor material del crimen.
Carola participó esta mañana de un peritaje de reconocimiento de esa prenda de vestir en el Comité de Operaciones levantado por la policía bonaerense en proximidades de la comisaría de Villa Tesei, del cual participó también el fiscal del caso, Marcelo Tavolaro.
La mujer llegó pasadas las 11.00 al Comité de Operaciones y se reunió de inmediato con el segundo jefe de la policía bonaerense, Hugo Matzkin y con el fiscal Tavolaro.
Tras permanecer media hora, la madre de Candela se retiró del lugar acompañada de otra mujer a bordo de un automóvil Fiat Siena gris sin hacer declaraciones.
Minutos después, se retiró el fiscal Tavolaro, quien se limitó a explicar que Carola Labrador concurrió "a cumplir una diligencia judicial".
Fuentes de la investigación aclararon que la mujer fue citada para reconocer un abrigo hallado en la casa del detenido Bermúdez Rodríguez, en Morón, durante un allanamiento realizado la noche del miércoles tras su detención.
En ese procedimiento también fue secuestrada una camioneta Peugeot Partner bordó que está siendo peritada en busca de rastros de la niña.
# ¿"El perejil?"
Esta mañana, el carpintero Ramón Altamirano, detenido como presunto partícipe necesario en el crimen de Candela Rodríguez, pidió declarar ante la Justicia, y, según su abogado, "va decir la verdad" porque es "inocente".
El letrado defensor Matías Morla afirmó que el testigo de identidad reservada "miente" en lo que dijo sobre su cliente y la esposa, Nélida Altamirano, en relación al crimen de Candela, y consideró que son "perejiles" en la causa.
"Altamirano es un carpintero que le hicieron hacer un cerco (de la casa donde se sospecha que estuvo secuestrada la niña) y no sabe más nada", sentenció Morla en diálogo con la prensa en los departamentos judiciales de Morón.
En tanto, Morla precisó que la mujer del carpintero declarará en las próximas horas ante la Fiscalía a fin de aclarar que estuvo de viaje en Tucumán cuando sucedieron los acontecimientos del caso de la niña de 11 años.
"La están acusando de que estuvo acá cuando estaba en Tucumán y tengo pruebas contundentes como los pasajes de ida y vuelta, y una tarjeta de crédito firmada con su puño y letra que estuvo en un supermercado", aseveró Morla.
El carpintero se lo vincula de haberle llevado comida -arroz con pollo- a Candela en la casa de la calle Kiernan 992, de la localidad bonaerense de Villa Tesei, partido de Hurlingham, y además es el propietario de la vivienda de Charrúas 1081, situada en la misma zona, donde se sospechó que la nena también estuvo cautiva allí.
Cabe recordar que el miércoles pasado (07/09) y en sintonía con el Gobierno nacional, el ministro de Justicia bonaerense Ricardo Casal dijo tras una reunión con diputados de la Provincia, que la investigación por el secuestro y crimen de Candela Rodríguez "es muy compleja".
"Hemos tenido una extensa reunión con todos los detalles de la investigación, sobre los cuerpos que han trabajado y sobre otras cuestiones de diseño de la política criminal. Este caso es gravísimo; incluye la muerte de una nena de once años", declaró el ministro bonaerense tras la reunión.
En breves declaraciones a la prensa, el funcionario indicó que la investigación "es muy compleja" y por tal motivo advirtió que no iba a dar opiniones o informaciones sobre la causa.
"Lo de hoy fue una reunión informativa y se debatió sobre algunas políticas. Con reservas, cada uno ha vertido su opinión y ha sido respetada", completó Casal.
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