lunes, 30 de marzo de 2015

BAJO SOSPECHA… LA TERMOELÉCTRICA DE ENSENADA

AGENCIA / EL BONAERENSE 



 Mario Secco 

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Ya no se trata de la denuncia de la organización no gubernamental de Ensenada, Nuevo Ambiente, que había advertido de los problemas ambientales en la Laguna los Patos por imprevisiones en la construcción de la Usina Termoeléctrica. No. Ahora es dinero.



Justo cuando el intendente Mario Secco afirma que quiere quedarse otro mandato más al frente de Ensenada: "Yo voy candidato a intendente y me voy a quedar ahí, me gusta ser intendente de Ensenada y creo que puedo dar 4 años más de éxito. He tenido 12 años brillantes que han sido los mejores 12 años de la historia de los 214 años que tiene Ensenada, la gente dice que soy el intendente que más hizo, que más gestionó, que más exitoso fue."

 Pero el diario Hoy, de La Plata, puso en duda el gran orgullo de Secco, la central termoeléctrica Barragán.

El matutino mencionó: irregularidades "en sobreprecios, falta de estudios sobre el impacto ambiental, violaciones a la ley de Obra Pública, contratos directos sin licitación previa, son sólo algunas características de este emprendimiento que representa un claro ejemplo de la putrefacción de la mal llamada década ganada."

 La termoeléctrica construida en Ensenada fue investigada por la Auditoría General de la Nación: había sido presupuestada en casi US$1.500 millones pero terminó costando más US$2.340 millones, +61%. Difícil de explicar y menos de aceptar.

 El exsecretario de Energía de la Nación, Emilio Apud, señaló que “la estación Barragán en Ensenada se hizo no pensando una política energética de cara al futuro. De ahí que la misma sirva para muy poco y haya costado casi el doble de lo que estaba presupuestado en un comienzo”.

 Según él, “El populismo llevado a la energía lleva a este tipo de situaciones, donde se fija en propulsar la demanda como sea, desentendiéndose de la oferta de gas y electricidad. Después de 12 años, vemos que ni siquiera se ha instalado la mitad de lo que se tendría que haber instalado en este tiempo en materia de infraestructura energética, en un escenario donde la demanda eléctrica creció menos que en la década anterior y con obras como la estación Barragán que no sirven para paliar la crisis del sector”.

 Las centrales que se han construido en los últimos años suman 3.000 megavatios en los casi 12 años del Modelo K. Pero se tendrían que haber puesto en marcha entre 12.000 y 13.000 megavatios para satisfacer la demanda interna.

 Otra vez el Hoy: "Desde el gobierno se quiere vender como grandes logros obras con graves problemas de infraestructura, donde la corrupción salta por todos lados con sobreprecios que muchas veces oscilan entre un 100 a 300% de lo presupuestado. Este sistema oscuro es el que lleva a que, año tras años, se repitan los cortes de luz y se deba gastar cientos de millones de dólares en importación de hidrocarburos."

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