domingo, 12 de abril de 2015

LORENZETTI A CRISTINA: "LA LISTA DE CONJUECES QUIZÁ FUE INCONSTITUCIONAL"

AGENCIA / CLAVES 


Ricardo Lorenzetti, presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación: no es tan sencillo tal como creen los K, ampliar la Corte y designar conjueces. 

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). 6 temas muy importantes a tener en cuenta en la coyuntura. Hasta ahora, ninguno de ellos logró la merecida atención de la opinión pública aunque son muy trascendentes.



Y no son consecuencia de la iniciativa de los políticos opositores sino que son circunstancias surgidas de la propia inercia de la realidad, y diversos errores del gobernante Frente para la Victoria. Pero hay que tenerlos en cuenta: 1. La ampliación de la Corte Suprema de Justicia de la Nación para designar a conjueces K resulta un tema clave de los próximos 40 días.

 A propósito, Joaquín Morales Solá en el diario La Nación, de Ciudad de Buenos Aires:

 "(...) Los kirchneristas explican que la Presidenta se fastidió cuando se enteró (o supuso) que la Corte tomaría dos decisiones. Confirmaría la inconstitucionalidad del acuerdo con Irán y ordenaría abrir la investigación sobre ese tratado que pidió el fiscal Nisman.

Prejuicio o paranoia. O las dos cosas juntas. La inconstitucionalidad o no del acuerdo con Irán no pasó nunca por la Corte. Lo declararon inconstitucional un juez de primera instancia, una Cámara Federal y ahora está en poder de la Cámara de Casación. Llegará a la Corte Suprema, pero ninguno de sus jueces vio nunca ese expediente. El caso más claro de la fantasía persecutoria que aflige al Gobierno es el que se refiere a la Corte y a la denuncia de Nisman.

Si la Cámara de Casación, que es donde está ahora, decidiera rechazar nuevamente las graves acusaciones del fiscal muerto, a la Corte no le quedará otro camino que cerrar el expediente por falta de sentencia firme.

El fiscal Germán Moldes anunció que recurrirá a la Corte si Casación le deniega la investigación. Pero hay una jurisprudencia tan larga como la existencia misma de la Corte: el tribunal supremo sólo resuelve sobre sentencias firmes o sobre cautelares que pueden significar una sentencia. La denuncia de Nisman fue rechazada por un juez de primera instancia, por la Cámara Federal y llegaría a la Corte si también la rechazara la Cámara de Casación. Jamás la Corte ordenó abrir una investigación contra la opinión de tres instancias inferiores.

 ¿Qué quiere hacer, entonces? Ampliar la Corte. Ésa es la decisión tomada por el kirchnerismo. El número ideal que se maneja en el Gobierno y en el Congreso es de nueve miembros. Hay dos consecuencias posibles para esa decisión, una peor que la otra, pero en ambos casos la Corte actual dejaría de ser lo que es. Un golpe perfecto contra el único poder del Estado que la Presidenta no controló nunca.

 La ampliación de la Corte puede resolverse por mayoría simple de las dos cámaras del Congreso. Suponiendo que se volviera al número de la Corte menemista, nueve, y que los cargos no se llenaran con conjueces, el resultado sería la parálisis absoluta de la Corte. Los cuatro miembros actuales quedarían en minoría frente al total de jueces previsto por la ley. La Corte no podría tomar ninguna decisión hasta su nueva integración. La última instancia de la Justicia habría sido fulminada. Por fin, estamos ante un claro proyecto golpista y destituyente, pero no es contra el Gobierno.

El Gobierno es su autor. La otra alternativa es peor. Si los nuevos cinco cargos fueran cubiertos por conjueces, entonces la Corte sí podrá resolver, pero los conjueces son todos kirchneristas o filokirchneristas.

Una mayoría de cinco a cuatro (o de seis a tres, en algunos casos) volcaría siempre la balanza a favor de los intereses del Gobierno. El cristinismo habría tomado, al final del día, la colina decisiva de la Justicia. Los conjueces de la Corte fueron designados el año pasado por un decreto de Cristina Kirchner, pero el trámite parlamentario podría ser inconstitucional.

El acuerdo de esos conjueces se resolvió por mayoría simple, porque el oficialismo no tuvo nunca (ni tendrá) los dos tercios que necesitan los jueces de la Corte. La Constitución no dice nada sobre qué mayoría necesitan los conjueces de la Corte, pero estipula con precisión una mayoría especial, los dos tercios de los presentes, para la designación de los jueces del tribunal.

¿Por qué los conjueces tendrían requisitos distintos a los de los jueces si deberán cumplir la misma tarea que éstos? La Constitución no puede, desde ya, prever todas las barbaridades institucionales que son capaces de cometer los gobernantes argentinos. (...)"

 2. Carlos Corach es autor de una frase contundente: "No importa la situación. Una vez que uno es Presidente, tiene el poder de la lapicera y la caja del Estado".

¿Su cercanía con Daniel Scioli habrá influenciado sobre el gobernador presidenciable? Mientras tanto, los K se afanan por presentar su aparente aceptación de Scioli como un triunfo ya que tendrían un próximo Héctor J. Cámpora.

Deberían meditar acerca de lo breve que fue el mandato del odontólogo inepto. Además, Scioli 2015 no sería Scioli 2016...

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