Gerardo Morales y Ernesto Sanz, 2 senadores nacionales de la UCR con diferente estrategia para 2015.
TANDIL (Nueva Era). Tal como había adelantado para Nueva Era el senador provincial Carlos Fernández, el radicalismo bonaerense postergó nuevamente la convención provincial de la UCR prevista para este fin de semana en Arrecife, a raíz de la falta de definiciones en torno al acuerdo con el PRO, mientras el titular del Comité Nacional y precandidato presidencial, Ernesto Sanz, intentará vencer las últimas resistencias internas para avanzar en la concreción del pacto con el macrismo.
La comisión provisoria elegida durante la frustrada convención provincial de Arrecifes postergó hasta principios de mayo la convocatoria a un nuevo encuentro, originalmente previsto para el 11 de abril, con el objetivo de "ganar tiempo para vencer las resistencias internas que aún genera el acuerdo con el PRO".
Para lograr este objetivo, Sanz tendrá esta semana dos encuentros clave: hoy recibirá a los senadores Gerardo Morales y Ángel Rozas, y a los diputados Julio Cobos y Ricardo Alfonsín; mientras que el miércoles se reunirá en General Alvear con intendentes bonaerenses que quieren evitar internas con el PRO en sus distritos.
El encuentro de hoy tendrá lugar en la sede del Comité Nacional del partido, en Capital Federal, donde los dirigentes que expresaron su oposición al acuerdo con el PRO, plantearán a Sanz una serie de exigencias para llevar adelante las conversaciones con el macrismo, entre las que figura la posibilidad de que cada provincia determine los entendimientos locales de acuerdo a las particularidades del territorio.
Los dirigentes también le transmitirán a Sanz su “preocupación por la carencia de definiciones programáticas” y en ese sentido le exigirán que “sean encarados lineamientos generales de la plataforma”.
En la provincia de Buenos Aires, los dirigentes díscolos liderados por Raúl Alfonsín -sector en el que se alinea el legislador tandilense Carlos Fernández- plantearán a Sanz "tener mayor injerencia en las negociaciones con el PRO" e insistirán con la promoción de un candidato propio en las Primarias a Gobernador, mientras presionan por habilitar un sistema de adhesiones múltiples, algo que el macrismo rechaza.
Con este objetivo, el Comité Provincia aprobó a fines de la semana pasada la creación de una comisión integrada por diversos sectores partidarios, que será la encargada de monitorear las negociaciones con el PRO. De esa manera, las diversas líneas internas del radicalismo provincial buscan asegurarse el control de la negociación con PRO, que a nivel nacional viene manejando Sanz, tal como quedó expresado en un documento difundido la semana pasada, en el que el Comité bonaerense pidió garantías de “igualdad de condiciones” para todos los candidatos de la UCR.
En este escenario, Sanz se reunirá mañana con intendentes radicales de la provincia, quienes buscarán cerrar posiciones respecto de un punto clave para su supervivencia: el respeto por sus territorios. Aún se desconoce si Lunghi será de la partida. En esa línea, los intendentes buscarán la garantía de que tendrán listas únicas en sus distritos, sin la aparición de algún dirigente macrista que le divida los votos.
Sin posiciones comunes respecto de las candidaturas provinciales y nacionales, los intendentes radicales son pragmáticos: su objetivo inmediato es asegurarse el distrito para los próximos cuatro años y, a partir de ese piso, ver cómo resuelven la cuestión seccional. Internamente los jefes comunales dicen contar con la garantía de Ernesto Sanz para no ser “molestados” en sus comunas, aunque prevalecen los interrogantes sobre cuál será el rumbo de la alianza.
Para el caso de Tandil, el lunghismo -sabedor de su superioridad- ha señalado públicamente su intención de competir contra el PRO local en las PASO. Apoyos cruzados Sanz se mostró confiado en que Mauricio Macri lo acompañe en caso de ganar las PASO, mientras que desde el macrismo respondieron que el jefe de Gobierno porteño "se alineará, acompañará y votará" al candidato que se imponga en la interna que surja del acuerdo entre el PRO y el radicalismo.
“El que gana, tiene la responsabilidad de conducir e integrar al resto, y los que pierden, sumarse. La prueba de fuego para este espacio es la general de octubre. Todos los esfuerzos que estamos haciendo es construir una alternativa concreta para octubre”, aseveró Sanz a la Agencia DIB: desde el PRO, los diputados Pablo Tonelli y Patricia Bullrich confirmaron que “por supuesto” Macri apoyará al candidato que surja ganador en las Primarias.
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