Barrabravas de Peñarol de Montevideo son acusados por asesinato y secuestro (Foto: Diario El País de Uruguay)
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- En Urgente24 ya hemos dicho que la violencia en el fútbol no es solo patrimonio argentino sino que afecta a los demás países del mundo.
Uruguay tampoco escapa a este flagelo, pero parece encarar de otro modo la cuestióna diferenciad de la Argentina, luego de que se diera a conocer que tres juzgados penales de Montevideo investigan un asesinato y un secuestro como parte de una trama de enfrentamientos entre facciones de la barra brava de Peñarol.
Por estos hechos fueron procesados tres adultos y la internación de dos menores de edad. Una nota publicada en el diario Subrayado de Montevideo dio a conocer este martes (28/04) que el hincha asesinado se llamaba Renny Auditore Ferreira. Era hincha del aurinegro y fue asesinado cuando volvía del partido que su equipo jugó ante Sudamérica, en marzo.
Según Subrayado, en 2001, Auditore había sido uno de los dos delincuentes que tomaron 10 rehenes y asaltaron el local de la empresa de ómnibus EGA, en Río Branco y Colonia. Dos menores lo acribillaron a balazos en la cabeza en Maroñas.
La víctima había salido pocos días antes de un establecimiento penitenciario. Además, el diario El País reveló que efectivos de la Dirección de Información Táctica de la Jefatura de Montevideo, en coordinación con la jueza Beatriz Larrieu, iniciaron una investigación y lograron identificar a los dos autores.
La Justicia de Menores de ese país decidió su internación en un instituto por el delito de homicidio. También, ese medio informó que uno de los asesinados es hijo de la Negra Sole, una mujer que guardaba en su casa de Cerro Norte un verdadero arsenal que pertenecía al Negro Paolo, otro hincha de Peñarol de la barra de Cerro Norte.
Actualmente, el Negro Paolo está preso por el homicidio del ex preso Richard Luján Díaz ocurrido el 10 de febrero de este año en Santa Cruz de la Sierra y Pasaje B. La Negra Sole también está presa por tráfico de armas.
Dos días después de la muerte de Luján Díaz, efectivos de la Jefatura de Montevideo y de la Guardia Republicana encontraron en su casa ametralladoras y pistolas calibre 9 milímetros que pertenecían al Negro Paolo y al ‘Vitito’.
Cuando esos dos sujetos estaban prófugos, sus fotos —proporcionadas por el Ministerio del Interior— fueron publicadas en los canales de televisión y en medios de prensa escritos. Por su parte, el secuestrado resultó ser un mozo del barrio Marconi, también integrante de uno de los grupos de la barra brava aurinegra.
El tráfico de armas, la venta y distribución de drogas y otros negocios son los que se investigan detrás de estos choques entre hinchas de un mismo equipo. Los hechos vienen siendo investigados por la Policía desde tiempo atrás. La lucha por el poder también fue motivo de tiroteos entre facciones de la barra de Peñarol luego de un partido amistoso ante Lanús.
En esa instancia hubo tres heridos. “El Negro Paolo" se llama Sergio Paolo López. Tiene antecedentes por narcotráfico y robo. Por su parte, el ‘Vitito’ se llama Víctor Hugo Albín. Tiene antecedentes por tráfico de drogas. Un documento judicial sobre Albín señala que nació el 22 de enero de 1983 y posee cinco antecedentes penales. Al igual que su cómplice “El Negro Paolo”, Albín creció cerca de Los Palomares de Cerro Norte.
El 13 de febrero, ellos dos y ‘El Yorka’ se enfrentaron a tiros con los Alvariza, narcotraficantes de Cerro Norte., según otro informe publicado por El País. En otro caso, que es investigado por el juez Roberto Timbal, aparecen también varias referencias a las disputas dentro de la hinchada de Peñarol. El expediente se refiere al secuestro de J.C.M., el propietario de un bar del barrio Marconi, posee antecedentes penales.
Los secuestradores primero exigieron US$ 200.000 por el mozo, pero luego lo liberaron sin hacerle ningún daño. Fuentes judiciales indicaron a El País que investigadores de la Dirección de Información Táctica descubrieron que el camarero secuestrado pertenecía a una de los ‘barras’ de Peñarol.
Por el secuestro la Justicia indagó al Coco pero no hubo pruebas en su contra. Lo remitieron por posesión de un arma cuyo número de serie había sido limado. Desde hace tres años, la Dirección de Inteligencia Policial tiene registrados a unos 400 hinchas considerados violentos, la mayoría de ellos simpatizantes de Nacional y Peñarol.
Según fuentes policiales, cada hinchada de los clubes grandes tiene lo que se considera “cerno duro” de medio centenar de facciones violentas que lideran las respectivas barrabravas. Este ‘cerno’ se divide en subgrupos en función de los barrios donde viven sus integrantes. El relevamiento de Inteligencia Policial incluyó filmaciones, fotografías y seguimientos de los líderes de cada una de estas facciones.
Por lo tanto, la base de datos de esta unidad policial cuenta con filmaciones de incidentes realizadas en el Estadio Centenario. Tanto Nacional como Peñarol tienen referentes de seguridad que ayudaron a mantener bajo el clima de violencia dentro de los estadios, reconocieron fuentes policiales a El País.
Sin embargo, agregaron, hay un grupo de hinchas jóvenes mirasoles y albos que rechazan ese liderazgo. Esos referentes son pagos por los clubes para que brinden seguridad según una sugerencia efectuada tiempo atrás por el Ministerio del Interior.
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