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| Foto: TÉLAM |
El seleccionado nacional de básquet derrotó al local México en el Preolímpico y logró al pase a los Juegos Olímpicos que se disputarán el año que viene en Río de Janeiro. Scola y Nocioni condujeron a los más jóvenes a otra hazaña.
(Rosario3.com) La Generación Dorada está más viva que nunca y este viernes por la noche le dio al deporte argentino otra página gloriosa. Con Luifa Scola y Chapu Nocioni como líderes de un equipo que se renueva y crece, el seleccionado nacional de básquet derrotó al local México en una de las semifinales del Preolímpico y logró el ansiado pasaporte a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Hubo emoción en el final. El seleccionado argentino de básquetbol concretó anoche el sueño de acceder a los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016, tras ganarle al local México por 78-70, en una de las semifinales del torneo celebrado en el Palacio de los Deportes del Distrito Federal mexicano.
El equipo dirigido por Sergio Hernández se repuso de la derrota 83-95 sufrida en la noche del miércoles ante el mismo rival por la segunda ronda del certamen. Argentina tiene además un premio extra, ya que dirimirá este sábado el título del certamen continental con la sorprendente Venezuela, que a primera hora derrotó con lo justo a Canadá por 79-78.
El capitán Luis Scola, con 18 tantos (10 en el último cuarto), se erigió en la principal vía de anotación. Pero la figura consular del juego resultó el santafesino Andrés 'Chapu' Nocioni, el otro sobreviviente de la Generación Dorada, que acumuló 10 puntos, 13 rebotes, 2 robos y 2 bloqueos.
Todo dentro de una performance colectiva firme, que fue de menos a más. En el arranque, Argentina apostó al vértigo de Campazzo para concretar conversiones rápidas. Sin embargo, los perimetrales mexicanos (Jorge Gutiérrez-Francisco Cruz) tuvieron demasiadas libertades para tirar y anotar. Así, en apenas 3 minutos, el equipo local ganaba por 10-9.
La pelota no le llegaba limpia a Scola (1-4 en cancha), que trató de descargar en el pibe Marcos Delía (6 puntos), bien asistido por un activo Campazzo (7) en esos 10m. iniciales. Sin embargo, el equipo de Hernández continuó penando en defensa, a pesar de que el pivote Gustavo Ayón (4) no lastimaba bajo el canasto. Gutiérrez (11 puntos y 3 robos) más Cruz (10 tantos y 2 rebotes) le daban aire al quinteto del español Valdeolmillos.
El parcial se cerró con diferencia mínima (26-25), por cortesía de un triple de Leonardo Mainoldi, que ingresó y metió un certero tiro angulado desde una esquina. En el segundo capítulo comenzaron las imperfecciones. El equipo padeció una racha negativa de cinco minutos sin anotar (Nocioni falló tres triples, Scola otro) y México, con el simple recurso de rotar la bola y seleccionar los mejores lanzamientos, estiró la ventaja a una máxima de 38-27, con un envío de Juan Toscano (7), otro que sacó provecho de la debilidad defensiva argentina. Campazzo, más allá de cierto apuro, continuó siendo la única luz en ofensiva (4), propició una ráfaga 6-0 y el partido quedó cuesta abajo por cinco (33-38).
El segmento culminó con un doble de Scola para redondear un parcial 40-35, en favor del elenco local. En la reanudación, el DT Hernández mandó rápido a la cancha al pibe Gallizzi para endurecer la defensa y salir en auxilio de un Scola desgastado.
Argentina descontó cifras y se puso 45-46. Pero México, en una ráfaga 8-2, volvió a tomar distancias (54-47), a falta de 5 minutos. Por un choque con el 'Chapu' Nocioni, el base local Gutiérrez se retiró lesionado y fue directo a vestuarios. Un triple más conversión de Safar achicó las cifras a 51-54, cuando quedaban casi 4 minutos. Dos bombas casi consecutivas de Laprovíttola, rescataron a la Argentina y pusieron tablas en 60, a falta de 1m. 14s.
El cuarto culminó empatado en 62 y con todo abierto, de cara al final. Reingresó Gutiérrez al parqué en el último segmento y fue víctima de una tapa de Nocioni, que seguía dejando la piel en cada bola. El encuentro ingresó en un terreno donde se jugaba con el corazón antes que con la cabeza. Argentina se mostraba mucho más intenso en defensa y un triple de Safar le entregó una diferencia de 71-66, cuando quedaban algo más de 5 minutos.
Dos pérdidas consecutivas que permitieron corridas del local acercaron a México (70-72), a falta de 3m. El estadio, a esa altura, era más caldera que nunca. Un rebote capturado más dos libres encestados por el capitán Scola, a poco más de un minuto, entregaron cierto alivio (76-70).
El apuro de los jugadores mexicanos en la selección de tiros (antes hubo un robo de Campazzo) garantizaron la clasificación argentina.
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