Foto: Gentileza LA VOZ |
El plantel trabajó este sábado por primera vez tras la eliminación de la Copa Sudamericana. Un grupo de 10 personas fue a la práctica, colgó un cartel y los jugadores se enojaron.
Momentos de tensión se vivieron este sábado en el entrenamiento de Belgrano. Un grupo de hinchas se hizo presente en la práctica y hubo cruces verbales con los jugadores que casi terminan en algo peor.
Estos simpatizantes, que llevaron un pasacalles con la frase "Jugadores váyanse a la gran c... de su madre", ya habían intentado el viernes mostrarle al plantel su descontento, aunque sólo pudieron hablar con Sebastián Prediger.
Este sábado, en pleno entrenamiento del plantel, llegaron y colgaron el pasacalles detrás de un arco donde estaba entrenándose Juan Carlos Olave y allí los jugadores reaccionaron.
Alambrado de por medio, varios de los referentes comenzaron a cruzar palabras con el grupo conformado por unos 10 socios. La situación se tensó. Se abrió la puerta de la cancha 2 y los jugadores salieron. Hubo empujones y agarrones.
El cuerpo técnico el que tuvo que interceder para que no haya consecuencias mayores. Luego de varios minutos de una compleja situación, y gracias a que intervinieron policías que estaban custodiando los partidos de Inferiores de AFA, el plantel pudo regresar a los trabajos. Fuente: La Voz
No hay comentarios:
Publicar un comentario