ALICIA KIRCHNER TAMBIÉN FRECUENTABA EL CONVENTO DE LOS BOLSOS

POLÍTICA / CASO LÓPEZ 

Siguen las revelaciones acerca del convento de General Rodríguez donde el exsecretario de Obras Públicas del kirchnerismo, José López, fue arrestado arrojando bolsos con dinero por arriba de la medianera. 


Tanto el intendente de esa ciudad, Darío Kubar como Marta, una exempleada del monasterio, revelaron en declaraciones a la prensa que la exministra de Desarrollo Social y actual gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, también frecuentaba el convento del obispo Di Monte.

Según Kubar en declaraciones a Primero Mendoza, Alicia era una de las personas que visitaba el Monasterio donde López intentó ocultar 9 millones de dólares, además de Julio De Vido y el ex gobernador Bonaerense Daniel Scioli. "De Cristina no lo sé", sostuvo el jefe comunal.

"El convento era frecuentado por De Vido, Scioli, el exintendente kirchnerista de General Rodríguez (Juan Pablo Anghileri) y el detenido López. También iba Alicia Kirchner, de Cristina no conozco", dijo el jefe comunal de Cambiemos a radio Mitre.

"Ya nada nos sorprende, nos dijeron que la bóveda tenía un destino mortuorio, que era una tumba que estaban preparando para una de las monjas", remarcó Kubar sobre la bóveda hallada en el convento. "No he hablado con las monjas, pero se las ve serenas, ellas conocían a López", agregó el jefe comunal de General Rodríguez, quien sostuvo también que el municipio se vio convulsionado desde el momento en que un vecino denunció al 911 los movimientos sospechosos de un hombre, quien luego resultaría ser el ex mano derecha de Julio De Vido.

Por su parte, en declaraciones a la radio AM 1300 La Salada, Marta, la exencargada del monasterio de General Rodríguez, también corroboró los dichos de Kubar acerca de la presencia de Alicia Kirchner.

Marta, quien mantiene un juicio con el convento por asuntos laborales, consultada sobre quienes iban al monasterio, respondió: “Alicia Kirchner, Cristóbal López con su familia y muchos más, y a los que dicen que había roces con Bergoglio, él ha ido también, yo trabajé ocho años ahí”, y agregó: “Me llamaban media hora antes y me decían que venía alguien y yo habría el portón”.