Unos dicen que el tema de fondo son las causas judiciales que se encuentran en el juzgado a cargo de María Romilda Servini de Cubría, y no precisamente expedientes tales como el Ibar Esteban Pérez Corradi (supuesta participación en el Triple Crimen de General Rodríguez y la ruta de la efedrina), sino temas que realmente le importan al Ejecutivo Nacional aunque también, agregan, al titular de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Esta confluencia de intereses lo deslizó la propia Servini de Cubría al involucrar en su denuncia de que la quieren jubilar al ministro de Justicia, Germán Garavano; y a Ricardo Lorenzetti (quien no necesariamente es la Corte Suprema de Justicia de la Nación, porque se trata de un colegiado, en especial hoy día).
El tema es muy delicado porque lo que está sugiriendo Servin i de Cubría es que Lorenzetti podría rectificar o desdecir su propia opinión en ocasión de justificar la continuidad de Carlos Fayt en la Corte, cuando los K quisieron jubilar al magistrado, quien bastante tiempo después se alejó por su propia voluntad.
Siempre según Servini de Cubría, unos 80 jueces deberían jubilarse por superar los 75 años en caso de que la supuesta iniciativa prosperase, cuando todavía hay 200 cargos vacantes en el Poder Judicial.
Dicen que en el medio aparecen las causas judiciales iniciadas por Elisa Carrió que están en el juzgado de Servini de Cubría.
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