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| Imagen del establecimiento educativo. |
Entre los detenidos se encuentran dos sacerdotes y un joven empleado del establecimiento: Se trata de Nicolás Corradi, de 82 años, y Horacio Corbacho, de 55, y José Luis Ojeda, un joven con discapacidad que trabajaba en el Instituto Antonio Próvolo para niños con problemas de audición, de la localidad mendocina de Luján de Cuyo.
Los religiosos están acusados de "abuso sexual agravado y corrupción de menores" en perjuicio de al menos 12 pequeños. El aberrante caso fue denunciado por la senadora radical Daniela García, quien se enteró de los supuestos abusos, a través de una integrante del Movimiento de Sordos de Mendoza que se acercó para solicitar su asesoramiento.
La legisladora radical contó que pidió la intervención del procurador para que le "indique los pasos a seguir, ya que es un delito de instancia privada y se necesitaban testigos y víctimas de los hechos".
El fiscal Fabricio Sidoti pidió que todos aquellos que hayan sido víctimas de estos hechos, lo denuncien en la Justicia. "Las víctimas denunciaron abuso sexual agravado con acceso carnal y sexo oral, y en los relatos dijeron que los llevaban a la 'Casa de Dios', los metían en un lugar ubicado en el fondo del instituto donde otras víctimas podían ver a través de la rendija de una puerta lo que pasaba", completó.
Según trascendió, los abusos se habrían cometido desde 2007 y entre las víctimas hay mujeres y hombres, muchos de los cuales ya son adultos.
Desde el Arzobispado de Mendoza, el vocero Marcelo De Benedictis dijo desconocer los antecedentes similares por abuso que tendría uno de los sacerdotes en Italia y comunicó que van a "rastrear cualquier información del tema, porque todo es muy inminente".
"Se brindará toda la cooperación que corresponda a las autoridades judiciales para el pronto esclarecimiento de los hechos denunciados", se detalló en un comunicado oficial.
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