GARCÍA, EL PIONERO DEL MULTIMEDIOS

OBITUARIO / 86 AÑOS 

Héctor Ricardo García entrevistando a
Ramón Bautista Ortega, Palito, en Teleonce.

(U24) - Héctor Ricardo García (18/11/1932 - 29/06/2019), "el Gallego García", fue un emprendedor tan audaz como innovador, al que nunca se le reconocieron todos sus aportes, probablemente por su propia personalidad introvertida y su decisión personal de no frecuentar al llamado 'círculo rojo'. 


En contraste con la enorme visión de García para comprender la comunicación popular, su soledad quedó en evidencia cuando sufrió la embestida impositiva de los K, y también en las demandas judiciales de su propia hija y luego de la AFIP, que le terminó provocando ceder sus activos a los hermanos Olmos.

En 1950, García inició la fugaz revista 'Sucedió'. Le fue mejor en 1954 con 'Así es Boca'. En 1955 creó la revista Así - El Mundo y la Luna en sus Manos, que llegó a tener 3 ediciones semanales.

 En abril de 1963 inició el diario Crónica, que tuvo 3 ediciones diarias, la matutina y 2 vespertinas. Luego, ya al frente de Editorial Sarmiento S.A., también creó los semanarios Ahora y Flash, y el diario Democracia.

Importante: García editaba productos gráficos que dependían del ingreso por venta de ejemplar. Y él conocía como casi nadie el comportamiento de ese público masivo. Por lo tanto, fue un intérprete y movilizador de la 'mass media'.

García llegó a ser el gran aliado de distribuidores de diarios y revistas, en especial de la familia Ayerbe. El ingreso por publicidad no era un factor decisivo en aquellos medios de García, probablemente una limitación importante desde un punto de vista comercial. Por ese motivo él no fue más grande que Grupo Clarín, por ejemplo.

En 1965, García adquirió Radio Colonia, con antena en la ciudad de Uruguay pero con importante llegada al Gran Buenos Aires y Ciudad de Buenos Aires. Garcia era el dueño del único multimedios que había en la Argentina, cuando no existía el concepto de multimedios. Pero, además, cada medio del holding era exitoso y se autofinanciaba.

Ahí apareció la limitación de García para construir su imperio: cómo convertir ese éxito en parte del poder corporativo y no permanecer como outsider.

Como empresario teatral, en 1972 adquirió el Cine Astor, sobre la Avenida Corrientes en Buenos Aires, transformándolo en el Teatro Astros; en 1975 creó el Complejo Estrellas, que se lo sabotearon desde la Triple A y sus áreas de influencia para impedir el estreno con una obra de Nacha Guevara, y más tarde se hizo cargo del Teatro Tronador de Mar del Plata.