martes, 9 de mayo de 2017

DE TERMAS A MDP: 3 MUERTOS (1 DECAPITADO, INCENDIADO Y COMIDO POR PERROS)

POLICIALES / LA ROSARIO BONAERENSE 

 Foto: Diario La capital MDP.


El narcotráfico sigue ganando las calles marplatenses. Tal como destacó Urgente24 el pasado 18 de abril de 2017, "se consumen 100 kg de droga por día y solo se secuestran 5 por mes”. En este contexto de lucha contra el narcotráfico enfocado en las fronteras del país para frenar el ingreso de droga, como si no se produciera puertas adentro, la ciudad atlántica volvió a padecer una noche de terror. 


Según la excelente nota del diario La capital de Mar del Plata, La batalla ocurrida en los barrios General Pueyrredon y El Martillo comenzó a gestarse el 30 de abril cuando fue asesinado Matías Moyano (31).

Ese día, Moyano salió como todos los domingos de la cárcel de Batán para gozar de su régimen de salidas transitorias. Iba en moto junto a su novia. En esas circunstancias, fue acribillado de cuatro balazos.

“Un hombre que iba en otra moto se puso al lado y lo fusiló”, comentó un investigador. Su crimen estaría vinculado a la venta de droga. Como ocurre en la gran mayoría de los casos, las versiones sobre el autor del crimen desató una ola de especulaciones, que motivaron al joven Nelson Alderete (25) hacer justicia por mano propia por la muerte de quien fuera su mejor amigo y compañero de andanzas: Moyano y Alderete nacieron en Termas de Río Hondo y habían llegado juntos a 'La feliz' por causas que aun se desconocen pero se sospecha de ajustes de cuentas en Santiago del Estero o traslados penitenciarios.

Así las cosas, Alderete esperó sin apuros en la esquina de Sicilia y Vidal durante la noche del domingo 7 de mayo.

En el interín, Mariano Lescano (18) –uno de los apuntados por el asesinato- pasó manejando en su Volskwagen Gol Trend Negro, con Cháves de acompañante. Y sin más: disparó contra el auto en varias oportunidades. Una de las balas hirió en la cabeza al adolescente de 15 años. Luego de cometer el ataque, Alderete escapó.

Lescano, al ver a Cháves gravemente herido, lo llevó de urgencia al Hospital Interzonal de Agudos, donde lo dejó en la guardia. A partir de ahí se puso en marcha otra venganza que se desarrolló la madrugada del lunes 8 de mayo.

Brian Falcato (17) y Lautaro Olivera quisieron vengar el ataque del adolescente y fueron a buscar a Alderete a su vivienda. Ahí se produjo otro feroz tiroteo que terminó con los dos jóvenes baleados e internados. Poco después, Chaves y Falcato murieron. Olivera agoniza en el Hospital Interzonal General de Agudos Dr. Alende.

Pero hay más: Enterados de las nuevas víctimas, amigos de Chaves, Falcato y Olivera decidieron volver a buscar a Alderete. Fueron en camionetas y cercaron el barrio. Lo encontraron en una casa ubicada en Sicilia al 7200. Estaba junto a su novia. Allí se produjo otro enfrentamiento y Alderete pudo escaparse y esconderse en una casa cercana. Pero lo encontraron y lo ejecutaron.

Las versiones preliminares de los vecinos indican que fue decapitado y prendido fuego. Luego lo tiraron en el medio de la calle. “Hubo que taparlo con chapas porque los perros se lo comían. Fueron siete horas de un tiroteo infernal”, comentó la vecina. Los resultados de la autopsia develarán la forma en que lo mataron. Además en esa vivienda fue apuñalado Heredia, contó el matutino local.

En el medio de los enfrentamientos para cercar a Alderete, los amigos de las otras víctimas cercaron las calles con autos. Los usaron como barricadas para que la policía no pudiera pasar. Un patrullero que intentó acercarse fue baleado. “Nadie podía entrar. Nosotros tuvimos que apagar la casa que había sido prendida fuego”, relató la vecina al diario.

Horas después, finalmente la policía pudo ingresar a la zona y la fiscal María Isabel Sánchez tomó intervención en el caso. En principio, los crímenes de Falcato y Cháves no serán investigados ya que su autor, Alderete, está muerto por lo que la acción penal quedó extinguida. En cambio, los acusados de haberlo decapitado y prender fuego su cuerpo aún están prófugos.

Según pudo confirmar La capital están siendo intensamente buscados por la Policía y en las próximas horas podrían efectuarse algunas detenciones. Inquieta por estas horas que no se dé con los delincuentes que aun continúan prófugos.

Desde la Sociedad de Fomento del barrio Pueyrredón, el delegado Luis Pinto denuncó: “Andan todos los días a los tiros, es una constante. Cuando pasás la 47, siempre en las calles asaltan a la gente. A una señora la asaltaron ante ayer: le robaron, le pegaron y le dieron un cuchillazo”.

“Las autoridades no nos han dado respuesta y acá, si no hay una policía permanente, no se va a poder hacer nada. Estamos peor que todos los barrios en inseguridad“, agregó.

En diálogo a El marplatense, Pinto consideró que desde enero la situación tocó fondo: “Hay una situación caótica porque se juntaron tres villas en el barrio: se juntó la Villa Vertiz, la Villa de Paso y la de los Uruguayos. Desde el verano que esta problemática es más crítica”.

“En el barrio hay mucha droga. No sabemos en qué lugares del barrio se vende o quién la vende, pero a simple vista se puede ver a todos los chicos drogándose”, afirmó, e insistió: “Detrás de la Sociedad de Fomento, todos los días se drogan, se tirotean y están robando”.

Sin embargo, el secretario de Seguridad municipal Fernando Telpuk afirmó tajante que “No se puede hablar de dos bandas narcos disputándose el territorio”.

“Es cierto que no fue hecho aislado, pero acá estamos hablando de vecinos que se conocían de otra provincia, que mataron a uno y después fueron a vengarlo”, afirmó el funcionario en diálogo con radio Mitre Mar del Plata.

“No están vinculados con el tipo de delito que han cometido en su historia criminal, ya que tienen antecedentes por robos calificados, pero no por narcotráfico”, agregó.

“Mañana desplegaremos un grupo de efectivos de la fuerza local en el barrio, más allá de que hoy también hubo presencia. Además, coordiné con el Ministerio de Seguridad de la Nación para sumar miembros de Prefectura Nacional que están en la ciudad”, apuntó el funcionario.

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