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| Hace tiempo que es muy incómoda la situación de Claudia Mizawak. |
Más de uno de los 7 diputados del FpV integrantes de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Juicio Político de la Cámara baja, se habrá arrepentido de acusar al vocal del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Carlos Chiara Díaz, para que se le inicie el proceso de destitución de su cargo, debido a una denuncia en su contra por mal desempeño de sus funciones y supuesta utilización irregular de viáticos.
El magistrado a quien la mencionada comisión citó para que ejerciera su defensa, hizo uso de ello y durante la misma reveló cuestiones que dejaron muy mal parados a otros miembros del STJ, esencialmente a su presidenta Claudia Mizawak, muy ligada al ex gobernador Sergio Urribarri, pero al mismo tiempo les hizo pasar un muy mal momento a varios de los legisladores del FpV, algunos de los cuales se encuentran imputados en causas de corrupción muy graves, como el caso del ex ministro de Comunicación (y algo de Cultura), Pedro Báez, ahora diputado e integrante nada menos que de esa comisión.
Chiara Díaz, tal como adelantó Urgente24, señaló durante su defensa: “Nunca vi la posibilidad de prorrogar las sesiones (ordinarias) para hacer un juicio político. Acá hay algo raro. Acá hay otra cosa y es lo que se están preguntando algunos periodistas”, explicando luego que “pareciera que lo que se está buscando es conformar una nueva mayoría en la Sala Penal”.
Urgente24 había publicado que existiría un plan para destituir a Chiara Díaz, integrante de la Sala de Asuntos Constitucionales y Penal del STJ, ya que el ex gobernador y el resto de los kirchneristas que están siendo investigados por varios casos de corrupción muy graves creen que el vocal podría ser condescendiente con los dictámenes condenatorios que se pudieran imponer sobre las mismas y que puedan llegar a ese Tribunal, integrado además por la presidenta del STJ, Claudia Mizawak, y Omar Carubia.
El vocal al momento de ejercer su defensa, acusó a la presidenta del STJ, Claudia Mizawak, de realizar “maniobras” para afectarlo con el supuesto interés político de destituirlo de la Sala Penal para conformar “una nueva mayoría”.
También mencionó que durante la gestión del ex gobernador radical Sergio Montiel, se quiso hacer lo mismo al promoverse una acusación contra los tres integrantes de la Sala Penal, de ese entonces: Chiara Díaz, Daniel Carubia, (que respondían al PJ) y Miguel Carlín (a la UCR). Casualmente quien ahora se menciona como su posible reemplazante, el actual Fiscal de Estado, el ahora kirchnerista Julio Rodríguez Signes, y supuesto socio de Urribarri, también lo era en aquella época.
Claro que por entonces era un ferviente defensor del radicalismo. Eso forma parte de la lamentable historia de la política entrerriana de los últimos 33 años. Respecto a los viajes y viáticos que ha cobrado, según lo denunciado en su contra, Chiara Díaz expresó: “Eso hay que compararlo con el desempeño de los demás vocales. Yo les quiero pedir que a los demás vocales les hagan la misma investigación que me hicieron a mí, no para cambiar el sujeto, sino simplemente para que vean la importancia de los datos”, y se despachó nuevamente contra Mizawak al señalar “ella, la reina de los viajes”.
Ante el cariz que iban tomando las declaraciones del magistrado el presidente de la comisión, el kirchnerista Diego Lara quiso evitar que siga hablando.
Fue peor, Ciara Díaz se las agarró contra los diputados presentes del FpV y exclamó: “Yo estoy limpito, no sé si acá están todos limpitos”.
Más adelante, envalentonado por el silencio y asombro de los diputados ante sus denuncias, el magistrado hasta se animó a cuestionar la vida privada de varios de ellos, quizás como revancha a lo que varios diputados del FpV habían hecho con la suya.
UN PEN-DRIVE ROSA Y UNA “LECHUZA”
Las denuncias efectuadas por Chaira Díaz dejan en evidencia que algo sucedió para el alevoso cambio de posición de los diputados oficialistas, que decidieron acusarlo para llevarlo al juicio político, cuando unas semanas antes habían desistido de esa posibilidad.
Hay quienes aseguran que este final tiene que ver con recientes actuaciones judiciales contra miembros del anterior gobierno y la familia del ex gobernador Urribarri. Comentarios de este calibre hay por cada pasillo de la Casa Gris; entre los más llamativos hay dos: está el que indica quien sería el abogado de doble apellido que se sentaría en el lugar de Chiara Díaz; el otro habla de la ofuscación de cierto funcionario para que “no entreguen información de adentro”, tal vez, refiriéndose a un encuentro que se habría producido en una estación de servicio, en las cercanías de la ciudad de Victoria, donde aparentemente llegó con prisa un automóvil, que supuestamente era conducido por una “lechuza” con datos en un Pen Drive color rosa, cuya información figuraría en la denuncia del joven y movedizo abogado que realizara la denuncia contra Chiara Díaz.
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