ESPECTÁCULOS / INVESTIGACIÓN
(T) - El director del teatro Bolshoi, Vladimir Úrin, envió una carta de protesta al presidente ruso, Vladimir Putin, por el registro del domicilio y el interrogatorio al que fue sometido el director teatral Kiril Serebrénnikov en un caso de corrupción.
"Considero que no es correcto cómo se hicieron las cosas en relación con el director. Es un artista, una persona que no se encarga, por lo que yo sé, de la parte financiera", dijo Úrin a la prensa local.
Úrin, que acusó a la prensa de contribuir al escándalo al acusar a Serebrénnikov sin conocimiento de causa, aseguró que su punto de vista se lo había expresado al presidente en una carta.
"Espero que la investigación sea extremadamente objetiva, en el marco de la ley y con el máximo respeto hacia una persona de renombre mundial", subrayó en la misiva reproducida parcialmente por la agencia EFE.
Serebrénnikov, uno de los directores de teatro más respetados de este país, fue interrogado ayer por el Comité de Instrucción y tanto su domicilio como su despacho en el Centro Gógol registrados en un caso de malversación de fondos públicos, lo que causó un gran revuelo en círculos culturales moscovitas.
Famosos actores y directores teatrales también firmaron ayer una carta en la que expresaron su consternación por el caso y manifestaron su apoyo a Serebrénnikov y al Centro Gógol, donde se concentraron decenas de personas.
El Comité de Instrucción informó que los registros están relacionados con un caso penal de malversación de fondos públicos ocurrido en 2014 por valor de 200 millones de rublos (unos 35 millones de dólares).
Serebrénnikov, de 47 años, ha participado en varias manifestaciones de protesta contra el presidente ruso, Vladimir Putin, y criticado la creciente influencia de la Iglesia Ortodoxa, como en su última película "El Estudiante" que fue premiada en Cannes.
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