FÚTBOL / COPA SUDAMERICANA
(DP) - La ambición y los sueños de Defensa y Justicia no solamente viajan por el sendero de la Superliga. También la Copa Sudamericana está en la agenda y en la mira de este sorprendente Halcón, que hoy (desde las 21.30, por DirecTV y directvplay.com/ar) recibirá a Botafogo para tratar de torcer el destino de esta serie correspondiente a la primera fase, cuyo comienzo marcó un triunfo de los brasileños por 1 a 0 en Río de Janeiro.
Hace dos semanas, en Brasil, la igualdad sin goles le parecía un excelente negocio a Defensa, pero ya en tiempo adicionado un bombazo de Erik selló la victoria de Botafogo y le dejó un panorama con más complicaciones al conjunto de Sebastián Beccacece, porque esta noche saldrá al campo con la obligación de ganar y además deberá tomar recaudos para evitar que un gol del rival como visitante signifique un dolor de cabeza adicional.
El análisis previo de la revancha inevitablemente tiene que citar también el gran momento anímico y futbolístico de Defensa, puntero junto a Racing (y único invicto) cuando el campeonato argentino ya transita por su recta decisiva y solamente restan seis capítulos por desarrollarse.
El reciente triunfo obtenido en La Plata -1 a 0 sobre Gimnasia- fortaleció las chances de un equipo que nunca pierde la serenidad y que permanentemente busca el desequilibrio, con más o menos fluidez, con más o menos eficacia, pero en todo momento impulsado por una intensidad y una convicción que forman parte de su identidad futbolística.
Antes de enfrentar el domingo a Boca, en un choque clave para sus aspiraciones en el torneo local, Defensa tratará avanzar a la siguiente etapa de la Copa Sudamericana, contra este Botafogo que viene de clasificarse a la segunda ronda de la Copa de Brasil (le ganó por 2 a 0 a Campinense) y que en la primera parte del certamen carioca tuvo un flojo desempeño.
El frente internacional lo seduce, y la ventaja parcial en la llave le da cierta confianza, aunque seguramente la exigencia será grande hoy en la noche del Tomaghello de Florencio Varela.
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