El Estadio Arena Condá vivió un guiño del destino en el 1er. partido del Chapecoense luego de la tragedia. El campe'on, Palmeiras, comenzó arriba en el marcador, pero rápidamente llegó la igualdad del local. El gol lo marcó Douglas Grolli, quizás el nombre más significativo de los 25 que arribaron al club.
No por carrera, sino por una cadena de decisiones que lo pusieron en el foco de los comentarios, transformándolo en un nuevo líder. Apenas habían pasado 2 semanas desde la caída del avión que dejó un saldo de 71 víctimas, pero Grolli ya había tomado la decisión: volvería a la institución en la que se formó y debutó para dar una mano.
Fue el primer refuerzo que llegó. El marcador central de 27 años surgió de las inferiores de la entidad en 2008 y se mantuvo en el club de Santa Catarina hasta el 2011. Se despidió con la consagración en el Campeonato Catarinense, jugando 14 de los 18 juegos.
El ascenso a la Serie B todavía debía esperar una temporada más. Él pegó el gran salto al poderoso Gremio para comenzar un derrotero que lo harían pasar por Sao Caetano, Londrina, Cruzeiro y Ponte Preta. Entre 2014 y 2015 tuvo un breve regreso a Chapecó para jugar el 1er. año del club en la Serie A, el Brasileirao. Y ahora otra vez una circunstancia especial.
Nuestro primer GOL, @ChapecoenseReal, después de la tragedia lo hizo Douglas Grolli, de la cantera. #ForçaChape. pic.twitter.com/zRgBzeJ485
— Chapecoense Real (@Chapecoense_ES) 21 de enero de 2017
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