FÚTBOL

SEGUNDA CAÍDA DE LOCAL

Atlético le 'asestó' un duro golpe a River en su regreso al Monumental

River hincó rodilla por segunda vez en el Torneo Nacional B y el Monumental se quedó sin invicto. Atlético Tucumán dio el golpe y sorprendió a River en los primeros minutos, momento en el que sacó la diferencia decisiva en el partido. Los goles del ganador fueron anotados por Luis Rodríguez y César Montiglio, ambos en la primera parte.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24)  Esta vez no hubieron penales inexistentes sancionados para River y no pudo con Atlético Tucumán en su regreso tan esperado al Monumental. En unas tribunas llenas, al menos las que le permitió poblar el Gobierno de la Ciudad que autorizó un aforo de 40 mil espectadores, los que festejaron fueron los 4 mil tucumanos que llegaron en 30 micros a la Capital Federal.

Los tucumanos dieron el campanazo en el Monumental y se llevaron de Buenos Aires un triunfo muy importante para sus aspiraciones en una tarde que quedará como de las más gloriosas del ‘Decano’.

El partido arrancó con todo. Ni se jugaban 10’ que el juego tuvo 3 chances claras de anotar gol. Dos del lado de River, y la primera del partido fue para el visitante en los pies de Mariano Martínez, quien se tragó un gol cantado.

River, un poco sorprendido en el inicio por la osadía de Atlético, respondió con 2 jugadas que no terminaron en gol por esas cosas que tiene el fútbol. La primera fue un tiro de Cavenaghi cruzado que tapó bien el arquero Izchuk, y la segunda la tuvo Ríos que estampó el remate en el cuerpo de un zaguero cuando el arco estaba vacío luego de una jugada por derecha del ataque del equipo de Almeyda.

Lindo partido se presentó desde el vamos porque los dos salieron a buscar el gol de apertura del marcador.  Y quien lo consiguió primero fue el visitante con una corrida de contragolpe que terminó con el gol de la ‘Pulguita’ Rodríguez. Atlético Tucumán pasó a ganar el partido 1-0 cuando se jugaban 13’.

River estaba lanzado en ofensiva y Atlético cortó el avance en defensa y salió lanzado como una flecha en ataque. Buena jugada del equipo tucumano que acertó con la puñalada final ante la salida del indefenso Chichizola.

Y a los 22’, el ‘Decano’ tucumano asestó su segundo golpe y Montiglio aprovechó una regalía de la defensa y clavó el 2-0. Román falló en el cierre y Montiglio se fue mano a mano con Chichizola que otra vez la fue a buscar la pelota adentro de su  arco. En 25’, el Monumental quedaba sorprendido como nadie lo esperaba.

Pero el problema principal además del resultado, fue que River jugó muy mal en defensa y los tucumanos se percataron y fueron ambiciosos. River la pasó mal en la primera parte mientras Atlético tuvo piernas y ganas de buscar más goles.

El equipo de Almeyda avanzó cuando pudo pero el tema fue que retrocedió muy mal. El equipo se vio como partido y sin medio para contener, detalle que la defensa jamás pudo resolver.  

Después del gol de Montiglio el juego decreció en intensidad por Atlético metió el partido en el freezer. Lo de River fue impotencia y no pudo generar ocasiones de peligro en el arco tucumano, ante un rival que empezó a sacar la calculadora y a especular con el desenlace.

Atlético retrasó sus líneas en los minutos finales de la etapa y no mostró la ambición ofensiva de los primeros 20’. Aunque siempre sabiendo que River estaba para el cachetazo final y por eso fue en los minutos finales y por eso Chichizola tuvo que revolcarse en un par de jugadas para evitar otra caída de su arco.

River tuvo el descuento en los pies de Ríos apenas comenzado el complemento, pero el tiro del delantero de River se fue ancho luego de una buena combinación ofensiva. Era imperioso para las aspiraciones millonarias anotar un gol lo antes posible para pensar en positivo.

Cuando se jugaban 15', River era el neto dominador de las acciones ante un Atlético muy rezagado. El equipo visitante se sintió más cómodo defendiendo antes que ir a buscar algún gol definitorio. Si River recibía el tercero adiós partido.

El problema de River esta vez fue que no estuvo claro y cuando tuvo que ligar, no ligó. Tal como sucedió con un cabezazo de Carlos Sánchez que dio en el poste tras una grosera salida de Izchuk. El arquero salió a cazar mariposas y le regaló el descuento a River que falló en un momento clave porque quedaba media hora por jugar.

El 'Decano' tucumano, por momentos jugó con fuego por ser demasiado especulativo. River le rodeó el rancho y lo puso en peligro sin tener claridad. Si Atlético se animaba a más, podía jugar lejos de su arco y sostener el resultado más adelante con chances de volver a anotar. Lo que no se entiende del fútbol con los equipos que van ganando y tienen a su rival en coma. No lo atacan y, encima, permiten que reviva en caso de anotar un descuento.

Pero cuando promediaban los 30', River bajó la intensidad de sus avances y Atlético pudo salir un poco más. Al menos el equipo de Llop se paró casi en zona de mitad de cancha y pudo rematar más al arco. Las acciones dejaron de ser un monólogo de River y los tucumanos empezaron a tener un poco más la pelota. Algo esencial para descansar sin sobresaltos. Aunque no crea por esto que Atlético no dejó de atrincherarse cada vez que pudo cerca de su arco.

A los 38', Atlético perdió la chance de cerrar el partido con un remate cruzado de Espínola cuando debajo del arco esperaba sólo para empujarla Rodríguez. River lanzado, sufría en cada contragolpe. Por suerte para River, Atlético no fue ambicioso. De haberlo sido, el resultado pudo ser más abultado.

También Atlético lo tuvo a tiro a los 42' con una gran jugada del ex River Diego Barrado pero el remate lo sacó Chichizola con la punta de los dedos cuando el balón se colaba por arriba. Se consumieron los minutos y nada se modificó. Atlético sacó la diferencia en los primeros 20' y River no lo pudo revertir.

Campeonato duro si los hay. River tiene que recorrer mucho trecho y ya un par de equipos demostraron que se le puede ganar. Aldosivi y Atlético, ¿se entiende? ¡Sin olvidar que a Merlo no le cobraron un penal sobre la hora y que a Defensa y Justicia le empató con el tiro del final!