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| Foto: INFOBAE |
Alargando una importante racha de imbatibilidad en su coqueto reducto que llegó a las 22 presentaciones, San Martín le ganó a Vélez Sarsfield por 3 a 1 al cabo de un atractivo encuentro disputado en el estadio "Ingeniero Hilario Sánchez", por la vigésimo tercera jornada del torneo de Primera División.
Nicolás Tripichio, en contra de su valla, inauguró el marcador para el dueño de casa a los 16 minutos del primer tiempo mientras que Marcos Figueroa amplió la ventaja a los 44 de la misma etapa.
Nicolás Delgadillo descontó a los 29 minutos del complemento para el conjunto de Liniers y Leandro Martínez estableció las cifras definitivas a los 37 para el local.
Fortalecido anímicamente por la decisión del entrenador visitante de reservar algunos titulares para el encuentro del miércoles venidero por la Copa Argentina ante Lanús, el elenco verdinegro estableció desde el inicio una hegemonía por sobre un adversario que salvo el veterano Roberto Nanni, presentó una formación plagada de promisorios juveniles pero sin demasiado roce en la máxima categoría.
Luego de unos primeros minutos de estudio el local, a partir del buen manejo de José Luis Gómez y de la peligrosidad de Figueroa, impuso condiciones aunque tuvo la fortuna de aprovecharse de un error del guardavalla Alan Aguerre, quien falló en el cálculo ante un centro desde la derecha y le dejó servida la pelota a Martínez.
El remate pifiado de éste, que se iba afuera, dio en la humanidad de Tripichio, quien en su intento por despejar introdujo el balón en el arco. A partir de dicha conquista el "Fortín" procuró salir del asedio y a través de la habilidad del novel Delgadillo (17 años) provocó alguna zozobra en el local, equipo que se retrasó unos metros y que lastimó mediante algunas réplicas, generalmente bien resueltas por el eficiente Lautaro Gianetti.
La conquista que casi terminó por definir el cotejo provino de una escalada de Gómez, de gran actuación, que Figueroa definió con el arco libre, estableciendo una distancia en el marcador que a todas luces se mostraba exagerada.
En el complemento el experimentado entrenador visitante intentó con los ingresos del legendario Fabián Cubero y de Milton Caraglio equilibrar la inexperiencia demostrada por el visitante, decisión que pareció algo tardía debido a que el conjunto cuyano a esa altura se mostraba solvente y hasta pudo ampliar las cifras de haber estado algo más preciso en la definición.
Cuando nada hacía presagiar un descuento del equipo de Liniers, Delgadillo achicó la distancia a través de una excelso remate desde fuera del área pero la ilusión del equipo porteño se hizo añicos cuando Martínez, tras gran resolución, sometió a un indefenso Aguerre.
El dueño de casa terminó el partido floreándose y exhibiendo momentos de buen fútbol por lo que su victoria no admite discusión ante un rival plagado de juveniles con buen pie que de manera acelerada resultaron promovidos en forma simultánea a la división superior. http://www.ambito.com/
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