QUE NO SE DIGA
Boca tuvo que recurrir a los penales para eliminar al 'modesto' Santamarina
Boca salvó la ropa. Gracias a los penales (4-3) sigue en la Copa Argentina, al eliminar al digno Santamarina que se llevó un histórico 1-1 en los 90' reglamentarios. Los goles del partido los marcaron Martín Michel y Facundo Roncaglia.
¿Quién iba a decir que este equipo del argentino A, iba a llevar a Boca hasta los penales en su debut en la Copa Argentina?. INCREÍBLE. ¡Qué lindo que es el Fútbol!.
El arranque de partido fue muy sorpresivo como el desenlace de la noche. Ramón Santamarina, en 5', tuvo 3 chances de marcar goles cantados. La más clara fue la que tapó Orion (de milagro) cuando Ermini a quemarropa falló el destino del remate cuando estaba sólo casi debajo del arco.
Boca entró relajado y el equipo de Tandil con el cuchillo entre los dientes. Papelonezco lo de Boca en los primeros minutos, ya que recién a los 12' llegó con un tiro desde lejos de Blandi.
Martín Michel, único punta de Santamarina, fue una verdadera pesadilla para la defensa de Boca que de rocosa no tuvo nada. El campeón de Primera División cuando tuvo la pelota se vio obligado a marchar al ritmo de Riquelme y eso lo complicó.
Es que todos los jugadores están como obligados moralmente a dársela al '10' porque de lo contrario hay problemas. La verdad, Boca se equivoca si elige este camino. Ya hemos hablado mucho del tema y la verdad que nos cansa siempre contar lo mismo. Por la sencilla razón de que el fanático nunca cambiará de parecer por más que lo reconozca.
Lógicamente y dentro de lo que se esperaba, el partido se hizo más equilibrado por los 20' aunque Boca siguió lejos de su nivel ya que no monopolizó el juego. Sólo lo equilibró porque Santamarina levantó el pie del acelerador y empezó a trabajar el partido. Los 10' iniciales fueron una sorpresa inesperada y ellos mismos sabían que no lo podían sostener. Por eso los de Tandil empezaron a trabajar más lo defensivo antes que sorprender en ofensiva.
Promediando los 30', Boca comenzó a sentirse fastidioso. Si bien era el dueño absoluto del balón y de las acciones, no lograba entrar con peligro al área del ordenado equipo de Tandil. Marca férrea, mucha atención y alta concentración fueron los ejes del planteo del modesto y digno Santamarina.
No está demás decir que a esta altura, el arco de Orion le quedaba muy lejos a Santamarina, que generó todas las acciones de peligro real que tuvo la etapa. Pero a los de Tandil le quedaba una bala en el cargador antes del descanso.
Desenchufado, aburguesado y como subestimando, Boca entró a jugar el compromiso hasta que se enchufó. Pero Santamarina le clavó el puñal sobre la hora del primer tiempo con un cabezazo de Michel que sobró la mala cobertura de Schiavi.
El pase del '10' de Tandil, Zárate, fue muy bueno. ¡Si lo hubiera hecho Román!. ¡Como lo hubieran resaltado sus cortesanos obsecuentes!. ¡Qué poco ecuánimes són algunos comentaristas para con los demás jugadores!. Que se le va hacer... Así es todo en Argentina....
En el inicio del complemento, lo previsible. Santamarina se acobachó para aguantar los embates esperados y Boca merodeó el área de su rival desde los primeros minutos. La duda al momento pasaba por saber si Santamarina podía resistir y en el caso, cuanto.
Cerca del cuarto de hora, Riquelme perdió una ocasión cuando segundos antes, la perdió generando un contragolpe que no terminó en gol de Ermini porque el línea se equivocó feo. Era el segundo de los de Tandil.
El 10 de Boca fue determinante en los extremos. Casi genera un gol de Santamarina y por poco no le dio el empate a su equipo a los 15'. Pero a los 18', Roncaglia metió un cabezazo (muy parecido al gol de Michel) tras un centro del mismo 10 de Boca y puso el 1-1. La defensa de Santamarina se descuidó y lo pagó caro. ¡Tanto no podía resistir!.
Boca siguió intensificando sus ataques porque un 1-1, era muy poco jugados 70' por más de tener controlado el partido. No perdamos de vista que el rival de Boca fue un equipo que participa en un torneo de dos categorías inferiores de las que juega River, hoy en el Nacional B.
En los minutos finales, el mejor jugador de Boca fue Darío Cvitanich. Su movilidad desacomodó en varios pasajes a la defensa de Santamarina y Boca estuvo a tiro de marcar. No terminó las jugadas pero el olor a gol Cvitanich lo generó con su velocidad y profundidad, antes de ser reemplazado por Mouche.
Ya Ledesma había ingresado por Erviti y Chavez por Rivero, los cambios de Falcioni para intentar doblar el brazo de su modesto rival que camino por el desfiladero en los instantes finales. El arquero Bertoya tuvo su mejor intervención de la noche, cuando le tapó un tiro raso a Mouche. Esta jugada bien pudo ser el gol de la victoria para Boca. De todos modos, Santamarina resistió y terminó sacando un empate histórico en Salta ante el poderoso Boca, forzando la definición en los penales.
La tanda, finalmente, favoreció a Boca que se impuso por 4-3. El único que falló en Boca fue Somoza mientras que del lado de los tandilenses pifiaron Acosta y Gaspari. Boca sigue en carrera, ¡pero que no se diga Boca!.
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