En un megaoperativo de seguridad, Mauricio Macri comienza su presidencia este jueves. Según confirmaron fuentes policiales, el operativo contará al menos con 8.000 efectivos, entre 4.000 de la Policía Federal y la misma cantidad de Gendarmería.
También participará personal de Prefectura Naval y de la Policía Metropolitana. La ausencia de Cristina Kirchner en el traspaso permitió descomprimir un poco el operativo, ya que finalmente La Cámpora suspendió la movilización prevista para el Congreso por la mañana.
Inicialmente quien fuera hasta ahora el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, había acordado en una reunión con la futura ministra del área, Patricia Bullrich, encabezar el traspaso de mando. Sin embargo, Cristina Kirchner luego dispuso que el funcionario renuncie, al igual que todo su Gabinete.
Sin una cabeza clara Al culebrón del traspaso de mando se sumó un tema no menor: el tema de la seguridad. En este sentido, Anibal Fernández afirmó desconocer quién estará al frente del operativo.
La jornada será de particular sensibilidad en ese área, debido a la nutrida concurrencia de mandatarios y enviados de gobiernos de todo el mundo que tienen previsto participar de las ceremonias.
La declaración de Fernández se funda en su interpretación del fallo que dictó la jueza María Servini de Cubría, que estableció que el mandato de Cristina Kirchner concluyó a las 23:59 de este miércoles.
Fernández sostuvo que a esa hora también espiraron los de los funcionarios que la acompañaron. Sobre este tema, ayer decía en un canal televisivo: "Hasta hoy a las 24 horas estará Berni,mañana qué se yo. Hay que preguntarle a Federico Pinedo".
Además, se mostró muy crítico de la decisión de Servini de Cubría, por la que Cristina Kirchner anunció que no iría al Congreso para la ceremonia de traspaso de mando. "Estamos asistiendo a una locura que no tiene pies ni cabeza", evaluó el jefe de ministros, para quien funcionarios deberían seguir en sus cargos hasta que juren sus sucesores para evitar vacíos de poder.
No obstante, Fernández concedió que los jefes de las fuerzas de seguridad permanecerán en sus puestos. Sus palabras ocurrieron horas después de que el secretario de Seguridad, Sergio Berni, se reuniese con Patricia Bullrich.
Por lo pronto, participarán del operativo de seguridad el jefe de Policía Federal -el comisario general Román Di Santo- y el director general de Gendarmería Nacional -el comandante general Omar Kannemann-.(www.iprofesional.com)
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