(U24) - La compra de otros US$50 millones de reservas por parte del Banco Central movió de manera tenue el amperímetro de la cotización del dólar, que ganó 10 centavos este lunes el segmento mayorista para cerrar en $37
A pesar de la suba, que fue recortando a lo largo del día, la cotización todavía se encuentra muy por debajo de la banda inferior establecida por el BCRA como límite para la intervención en el mercado. Dicho piso se ubicaba en $37,45 en el arranque de la semana.
El dólar arrancó la jornada con un marcado sesgo alcista que se fue consolidando hasta alcanzar un techo intradiario de $37,21. Sin embargo, paradójicamente, la cotización retomó una tendencia declinante justo después de la compra del Central, que tenía por misión apuntalar los precios.
El BCRA compró US$50 millones a un precio promedio de $37 ,1310 y un máximo de $37,1400. Tras la operación, el precio mayorista se desplomó hasta los $37,05. El recorte de la suba inicial coincidió con la fortaleza de la oferta.
"El empuje de la oferta diluyó la suba inicial y acomodó los precios en un nivel discretamente más elevado que el del viernes pasado, pero siempre bastante alejado de la cota inferior de la zona de no intervención", apuntó Gustavo Quintana, de PR.
La moderada suba del tipo de cambio también le dio margen al Banco Central para convalidar otra baja de la tasa de interés, que retrocedió 0,30 puntos para finalizar la rueda en 57.801%, en promedio, en la subasta de sus Letras de Liquidez.
Por su parte, el dólar minorista finalizó en $38,057, de acuerdo al promedio del BCRA. La débil recuperación del dólar, por fuera de la "zona de no intervención" del Central estimula las reservas sobre el ingreso a una nuevo período de atraso cambiario, es decir que el tipo de cambio se aprecie corriendo de atrás a la inflación, una situación común en años electorales.
Tal como informó Urgente24, el último informe de la consultora Economía & Regiones señaló que la baja del dólar "responde al aumento circunstancial del poder adquisitivo del dinero, que es impulsado por la suba estacional de la demanda de dinero característica de este período del año".
En ese sentido, el informe advirtió sobre otro riesgo del atraso cambiario: el regreso de la corrida. Según el análisis de E&R, si sucede esta caída de la demanda de dinero "se materializaría a través de una corrida de los depósitos a plazo fijo del sector privado".
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