Argentina enfrenta a Nueva Zelanda desde las 12.45 en el mítico estadio inglés. Los rosarinos Leo Senatore y Juan Imhoff serán titulares en el equipo de Daniel Hourcade.
Llegó la hora. Los Pumas debutarán hoy en la octava edición del Mundial de rugby enfrentando a los All Blacks, defensores del título, a partir de las 12.45 (hora argentina) en el mítico estadio de Wembley.
El encuentro será de vital trascendencia para ambos equipos ya que, considerando la debilidad de los otros integrantes del grupo C, un triunfo dejará al vencedor a un paso de llevarse la zona.
Obviamente que el gran candidato a quedarse con la victoria es el equipo neocelandés, el único al que Los Pumas no pudieron vencer a lo largo de la historia. Apenas un empate y más de 20 derrotas hablan a las claras de que los All Blacks han sido por años la “sombra negra” albiceleste.
Pero, siempre hay una primera vez y no se descarta que sea hoy en Londres. Para lograr cambiar la historia, Los Pumas tendrán que jugar un partido perfecto y esperar (y forzar) que los neocelandeses no lo hagan.
Daniel Hourcade no se cansó de repetir que la única forma de vencer a los campeones mundiales es atacándolos. Y eso intentarán hacer sus dirigidos. Pero tendrán que ser inteligentes para que no ocurra lo mismo que pasó en Christchurch la última vez que se vieron las caras, cuando los All Blacks capitalizaron malas decisiones del equipo argentino para ganar el partido con claridad, más allá de un tibio repunte albiceleste al promediar el segundo tiempo.
Las claves pasarán por obtener los lanzamientos propios en las formaciones fijas, por salir jugando con criterio y sin arriesgar de más desde terreno argentino, por defender cada pelota como si fuera la última y por capitalizar cada oportunidad que se presente en campo rival, es decir hacer el partido perfecto.
Enfrente estará un adversario que perdió apenas tres encuentros desde que se coronó campeón mundial y que cuenta con un plantel impresionante. Hacen todo bien y si están en un buen día será una misión imposible derrotarlos.
Pero soñar no cuesta nada y este plantel, que viene en franco crecimiento, está palpitando este encuentro desde hace tiempo.
Y no parece imposible que hoy, en el templo del fútbol, el sueño del rugby argentino se transforme en realidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario