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LUCIANA VÁZQUEZ - PARA LA NACION
Otra figura de la gestión porteña del PRO es la elegida por la gobernadora electa de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal , para hacerse cargo de la cartera educativa del distrito escolar más grande del país.
Se trata del actual subsecretario de Políticas Educativas y de Carrera Docente del ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Alejandro Finocchiaro, el número dos del ministro Esteban Bullrich.
En la provincia, Finocchiaro estará al frente de la Dirección General de Cultura y Educación, que en la práctica es el ministerio de Educación provincial, cargo que hoy ocupa la escribana y abogada Nora de Lucía.
La altísima conflictividad del sindicalismo docente provincial, que condujo a más de 20 días de paro docente en 2014, es una pista para entender la elección de Finocchiaro, que desde 2007 viene consolidando su perfil como experto en la relación y la negociación con los gremios docentes, con suerte diversa.
Con un pasado profesional de abogado experto en litigios y larga experiencia académica en el área del derecho, Finocchiaro llegó a la gestión educativa en 2007 como asesor del ex ministro de Educación de CABA, Mariano Narodowski, con el rol expreso de negociar con los sindicatos docentes.
Sin embargo, en 2008, un paro docente de más de diez días y una relación tensa con los gremios docentes porteños terminaron dejándolo fuera de la gestión.
Finocchiaro había sido alumno de Narodowski en la maestría en Educación de la Universidad de San Andrés, que terminó con una tesis titulada "UBA. c/ Estado Nacional. Un estudio sobre autonomía universitaria", dirigida por el mismo Narodowski, donde analizaba el recurso interpuesto por la UBA contra la Ley de Educación Superior.
En 2011, Finocchiaro volvió a la gestión, siempre en la misma área, esta vez convocado por Bullrich y ante la resistencia de los gremios porteños. Ese año, de todas maneras, el gobierno de CABA logró alcanzar un acuerdo salarial con los gremios docentes que permitió iniciar las clases en tiempo y forma.
El conflicto docente, sin embargo, se instaló con siete días de paro y una carpa en Avenida de Mayo, a partir de la voluntad de Bullrich y su equipo de atemperar el peso del poder de los gremios docentes en la carrera de los docentes de CABA, con la modificación de la organización de las Juntas de Clasificación, organismo que regula los puntajes y evaluación de antecedentes de los docentes y donde los gremios tenían el mayor peso.
Finocchiaro tuvo un rol clave en el éxito de esa modernización que balanceó el cogobierno de los gremios, con la informatización del sistema de atribución de puntajes, que acotó la discrecionalidad en nombramientos y ascensos. Desde entonces, el distrito porteño logró prácticamente sortear los paros docentes.
Conocido por sus intereses diversos y originales, Finocchiaro completa su formación académica con un doctorado en Historia por la Universidad del Salvador. Cuenta con vasta experiencia en la docencia universitaria, como docente en Teoría del Estado en la Facultad de Derecho de la UBA, Política Internacional Contemporánea en la UCES y Procesos Socio-Históricos Mundiales y Derecho Político en la Universidad Nacional de La Matanza.
En esa universidad, fue Secretario Académico, Vicedecano y Decano del Departamento de Derecho y Ciencia Política y Coordinador de la Maestría en Gestión Judicial.
Es autor del libro El mito reformista, productor del documental "Mujeres de la Shoá", una realización del Museo Shoá de Argentina y la UNlaM, y admirador de Nelson Mandela. (www.lanacion.com.ar)
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