La búsqueda de Gabriel Cruz movilizó a toda España. El nene de 8 años desapareció el 26 de febrero en un pueblo cercano a Almería, en el sudeste del país, cuando salió para jugar a casa de un amigo.
Este mediodía, las autoridades informaron que apareció muerto en el baúl de un auto. El vehículo lo manejaba la novia de su papá.
"La guardia Civil, en la mañana de hoy, ha detenido a la pareja del padre de Gabriel cuando transportaba el cuerpo del pequeño en el maletero del coche", informó el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido.
Gabriel Cruz estaba en casa de su abuela, en la localidad de Las Hortichuelas, cuando salió para ir a jugar a casa de un amigo. No fue visto desde entonces. Tras su desaparición, la policía y voluntarios rastrillaron las áreas rurales de los alrededores, a pie y a caballo, con helicópteros y drones.
La detenida, de unos 35 años y origen dominicano, había acompañado al papá durante la búsqueda y se había mostrado dolida por lo sucedido ante la prensa. En una entrevista para TVE, la sospechosa, identificada como Ana Julia, dijo entre lágrimas que Gabriel nunca se alejaría de la casa. "Ese día no volvió. Ese día Gabriel no volvió", señalaba.
La única pista que tenía la policía sobre el nene era una remera, que aportó la mujer hace una semana en medio de un rastreo junto al papá, Ángel Cruz, en el Barranco de las Águilas. Sin embargo, el intento por esquivar las sospechas le jugó en contra.
A partir de ese momento, los investigadores colocaron el foco sobre ella porque esa zona ya había sido rastrillada por las autoridades. El único detenido por la desaparición era Diego Miguel, un hombre de 42 años que acosaba a la mamá de Gabriel, Patricia Ramírez.
El mismo día en que el nene fue visto por última vez, el sospechoso quebró por tercera vez la orden de alejamiento que tenía sobre la mujer desde hace dos años. El papá de la víctima declaró en su momento que no creía que esto tuviese que ver con la desaparición de su hijo.
Durante los últimos días, Ana Julia estuvo sometida a una estrecha vigilancia por su sospechoso descubrimiento. Según informaron fuentes de la investigación al diario El País de España, la mujer había sacado el cuerpo de un pozo por temor a que lo encontraran.
Tras conocerse la triste noticia, las autoridades españolas expresaron su dolor en las redes. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, escribió en un tuit: "Comparto con todos los españoles el dolor por la pérdida de Gabriel". El mandatario acompañó la publicación con el hashtag #TodosSomosGabriel. (TN)
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