(DP) - El bombero voluntario Jonathan Rampi fue asesinado de un disparo en el interior del vestuario del Destacamento de Boulogne del partido de San Isidro en la madrugada del 20 de agosto de 2015 y el autor material del crimen fue su compañero de tareas y ex agente de la Policía Federal Argentina, Gustavo Damián González, que, si bien atribuyó el hecho a una cuestión accidental, terminó siendo condenado sólo por “homicidio culposo” y, en consecuencia, recibiendo una pena menor y excarcelable.
Al cumplirse tres años del hecho, Astrid Rampi, hermana de la víctima, escribió esta emotiva carta: “Después de un tiempo aprendí y pude entender, que muchos saben más de lo que dicen, piensan más de lo hablan y que se dan cuenta mucho más de lo que creo, pero decidieron olvidar y tapar para no llevar en sus nombres una culpa que, igualmente, llevarán por siempre, porque con las mentiras se puede llegar muy lejos, pero lo que no se puede es regresar”, agrega. “Hermana de un héroe”, denominó la hermana de Jhony Rampi al escrito difundido en las redes sociales.
Además, sostiene que “porque aún tengo la esperanza de volver a ver a mi madre sonreír, porque siempre hice poesía para que puedas leerme hasta el alma, porque me atacaron por la espalda, ya que de frente sé que no podrían conmigo. Porque hicieron muchos planes, pero Dios tiene la última palabra y sobre todo porque quiero estar de pie ante el mundo y de rodillas ante Dios”.
“Se que el tiempo es sabio y que no sentencia de inmediato, pero al final da la razón a quien la tiene, porque cada persona, es dueña de su silencio, pero también esclava de sus palabras. No todo termina con la muerte, sino que es un largo camino de recompensas y tu vida valió la pena. Hasta el final contigo, eternamente juntos”, concluye.
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