(U24) - Argentina fue agresiva, buscó y luchó hasta la última pelota pero Brasil, con pocos recursos, se metió en la final de su Copa América 2019. Una vez clasificado al encuentro decisivo, la “verdeamarelha” logró poner fin a la incertidumbre que se había generado por la ausencia de Neymar y del temor al recordar el último evento importante en esas tierras, donde recibió siete goles por parte de Alemania en el Mundial 2014. Por eso, va camino a enterrar todas esas fobias y volver al primer plano continental.
El fixture “había sido confeccionado” para ver a los dos más poderosos de la copa en la final, pero el segundo puesto de Argentina alteró los planes y provocó un encuentro prematuro. Es decir: la final anticipada. Este fue el duelo más repetido en este certamen.
En total, se enfrentaron en 33 ocasiones, con 15 triunfos para la albiceleste, 10 para la Canarinha y 8 empates. Además, Brasil perdió en el estadio de Belo Horizonte nada más que dos de sus 10 partidos oficiales. Por consiguiente, la “verdeamarelha” eliminó a la albiceleste las últimas cinco veces que se enfrentaron en Copa América: en cuartos de final en 1995 y 1999; en la final en 2004 y 2007; en la semifinal 2019.
Durante los 90’ reglamentarios, Argentina se plantó con un esquema bien rígido 4-3-3 mientras que Brasil puso en cancha un 4-2-3-1, algo demasiado arriesgado que, al final, le dio resultado.
Al margen de eso, ambos protagonistas jugaron un partido intenso, dinámico aunque la “verdeamarelha” se mantuvo firme, convincente y fue peligroso en el juego aéreo. De ahí, los de Tite con Everton, Filipe Coutinho y Gabriel Jesús adelantaron sus líneas y acorralaron sobre su campo a los dirigidos por Scaloni.
De manera paulatina, Argentina pudo salir del sometimiento de Brasil ya que se armó en bloque para atacar a los locales que se mostraron seremos y manejaron mejor la pelota.
En esos primeros minutos, Leandro Paredes remató de media vuelta tras recibir un pase de Lionel Messi que forzó el despeje del arquero Allison. No obstante, un error en la defensa le permitió a Gabriel Jesús definir sobre la salida de Franco Armani luego de un gran pase de Roberto Firmino para poner el 1-0 para Brasil que dejó al descubierto una gran desconexión en la defensa argentina.
Con el devenir de los minutos, el partido empezó a picarse porque Argentina se desesperaba y la “Canarinha” atinaba nada más que a defenderse. En el final de la etapa inicial, Brasil tuvo el control de la pelota y puso en marcha el operativo desgaste de Argentina con un remate de Everton luego un tiro de esquina que quedó en las manos de Armani.
En la segunda mitad, la albiceleste tocó mucho más el balón con sus centrales y mostró más precisión en el ataque con las apariciones de Nicolás Tagliafico y de Lautaro Martínez que rompieron las líneas en el fondo brasileño. Por otra parte, Argentina puso más gente en ataque y se aprovechó de Brasil que estaba partido en el medio.
Sin embargo, el equipo de Tite puso en aprietos en la defensa albiceleste con un disparo de Filipe Coutinho que pasó por arriba del arco de Armani.
Mientras los minutos empezaban a consumirse, Lionel Scaloni puso en cancha a Ángel Di María para intentar dar vuelta el marcador, en cambio Brasil, con las salida de Gabriel Jesús por Allan se dedicó a cuidar el resultado.
De la nada misma y sin proponérselo, Roberto Firmino asestó el 2-0 para Brasil que enterró las ilusiones de Argentina de clasificarse la final. Pese a la inminente eliminación, la albiceleste no se resignó y peleó hasta el final con las corridas de Di María y Sergio Agüero, pero no le alcanzó.
Argentina se quedó sin final de Copa América de manera injusta e inexplicable y Brasil, sin merecerlo, ya es finalista y espera por el ganador de la semifinal entre Perú y Chile.
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