(U24) - Los mercados siguen muy atentos a lo que ocurre con Argentina tras el resultado de las PASO del pasado domingo 11 de agosto, en el que Macri fue duramente derrotado por su principal opositor Alberto Fernández (Frente de Todos).
Luego de hacer un repaso sobre el desastre fiscal que ocasionó Macri, guardado bajo la alfombra en los primeros años con endeudamiento externo, Bloomberg ya adelantó a Wall Street que, "salvo un milagro, Fernández asumirá la Presidencia el próximo 10 de diciembre": "Macri podría forzar una segunda vuelta si logra recuperar suficiente apoyo del candidato favorito y otros candidatos de nivel inferior antes de las elecciones oficiales del 27 de octubre para ubicarse a 10 puntos de Fernández.
Mientras Fernández también reciba menos del 45% por ciento de los votos, habrá una segunda vuelta el 24 de noviembre, lo que le dará más tiempo para girar su narrativa de regreso. Aún así, tendrá que confiar en una participación extraordinaria y probablemente reinventar su mensaje original de campaña, que ya comenzó a desviarse a la izquierda.
Muchos esperaban que Cristina Kirchner se postulara para presidente, a pesar de estar involucrada en investigaciones de corrupción que datan de su tiempo en el cargo. Ella niega haber actuado mal y ha llamado a la investigación persecución política. Su escaño en el Senado, que ganó en 2017, le otorga inmunidad legal, aunque eso podría ser despojado por un voto de dos tercios de la cámara alta.
Como vicepresidenta, ella sería la jefa del Senado, y al postularse en el puesto número 2, podrá mantenerse fuera de la mirada más dura del centro de atención. El primer día de negociación después de la votación, el denominado indicador de riesgo país de Argentina, el rendimiento adicional que exigen los inversores para mantener la deuda del gobierno sobre los bonos del Tesoro de EE. UU., aumentó a un máximo de 10 años, superando a los de todos los demás mercados emergentes, y su deuda ahora es el más costoso del mundo para asegurar contra el incumplimiento.
El propio Macri pareció conmocionado en su primera aparición pública, admitiendo que había realizado una "mala elección", prometiendo tímidamente que se realizaría un regreso y criticando a los encuestadores por sus errores.
Salvo un milagro para Macri, Fernández asumirá la presidencia el 10 de diciembre. El presidente tuiteó unos días después de la votación que él y Fernández habían hablado y que el presunto próximo líder 'mostró disposición a tratar de traer la calma a los mercados'.
Sin embargo, él hereda dependerá más de lo que él y su rival puedan hacer juntos en el ínterin para abordar las expectativas de incumplimiento, la economía real, la inflación, el ahorro y cualquier otra cantidad de factores que podrían hundir aún más la economía. Los mercados son cautelosos, pero los argentinos se han acostumbrado desde hace mucho tiempo al latigazo cervical".
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