CENTRO DE ARTES Y LETRAS
DE FLORENCIO VARELA
15 DE JUNIO - DÍA DEL LIBRO
Esta celebración comenzó en Argentina el 15 de junio de 1908, como "Fiesta del Libro". Ese día se entregaron los premios de un concurso literario organizado por el Consejo Nacional de Mujeres. En 1924, el Decreto Nº 1038 del Gobierno Nacional declaró como oficial la "Fiesta del Libro". En junio de 1941, una resolución Ministerial propuso llamar a la conmemoración "Día del Libro".
EL LIBRO
Este libro no es la Biblia,
pero encierra las verdades
que aclaran las tempestades
más oscuras de la mente,
debe el hombre ser valiente
para enfrentar las maldades.
A lo largo y a lo ancho
de este libro venturoso
he de encontrar el reposo
que mi alma tanto buscaba,
y ha de quedar encerrada
inundada en pleno gozo.
En esta obra vertidas
quedarán mis ocurrencias;
nunca he tenido exigencias
pero si escuchan les digo:
este libro será amigo
y siempre tendrá vigencia.
Ha de aflojar las dolencias
que siempre tiene el humano,
y ha de tenderles la mano
cuando estén en la cinchada,
las palabras encerradas
en mis increíbles cantos.
He dejado en la ciudad
un rosario de consejos
y como ahora me alejo
de sus calles, sus veredas,
en este libro les queda
las enseñanzas de un viejo.
Han de captar sus reflejos
aquellos que en nada creen,
si por acaso lo leen
tal vez alguna enseñanza
o alguna luz de esperanza
hasta su alma les llegue.
Mas los que con gusto acceden
a los versos bien floreados,
a quienes les ha gustado
el rimero melodioso
han de colmarse de gozo
con sólo tenerlo al lado.
En los momentos aciagos
o cuando afloja la suerte,
este libro que su fuerte
es dar alivio al paisano
se habrá de tener a mano...
como un amigo en la muerte.
El habrá de protegerlos,
hijos míos, de los males,
los consejos que a raudales
en sus escritos encierra
darán vueltas por la tierra
en un circuito incansable.
Por el mar que es insondable,
por el cielo que es eterno,
y también por el averno
donde almas torturadas
quedarán esperanzadas
de escapar de aquel infierno.
Aquí termina el cuaderno
de mis terribles andanzas;
estoy bailando una danza
porque ha triunfado mi canto;
complacer al Padre Santo
para ser feliz me alcanza.
Veo un rayo de esperanza
ya nada me desconcierta,
ya no debo estar alerta
porque me hundo cantando...
mi tumba me está esperando
¡Ya no ha de quedar abierta!
JULIO JORGE FARAONI
Fragmento del Poema Telúrico Popular
EL REGRESO DEL PAYADOR
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