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| Kim Jong-un y el líder surcoreano Moon Jae-in |
(U24) - Corea del Norte ha aceptado la oferta de Corea del Sur de sentarse a dialogar el martes 9/1, informó la agencia Yonhap. Oficiales del régimen de Kim Jong-un y del Gobierno de Seúl se encontrarán en Panmunjom, un pueblo que atraviesa la zona desmilitarizada entre los 2 países, en lo que será su primer contacto de alto nivel desde diciembre de 2015.
La conversación, apunta Justin McCurry del diario británico The Guardian, se llevará a cabo en la Casa de la Paz, en el lado surcoreano de Panmunjom, e inicialmente estará centrada en la posible participación de Corea del Norte en las próximas Olimpiadas de Invierno en la ciudad surcoreana de Pyeongchang (del 9 al 25 de febrero).
"Pero los oficiales -cuyas identidades todavía deben ser confirmadas- también hablarán de cómo mejorar los lazos en general, luego de un año en el que Corea del Norte ha aumentado las tensiones en la región con una serie de lanzamiento de misiles y su sexto -y más poderoso- ensayo nuclear", escribió McCurry.
"Las partes decidieron discutir temas de tipo operativo con el intercambio de documentos", explicó Baik Tae-hyun, vocero del ministerio surcoreano para la Unificación, en conferencia de prensa. El anuncio llegó horas después de que Estados Unidos aceptara posponer los ejercicios militares conjuntos con Corea del Sur hasta después de las Olimpiadas de Invierno.
Estas maniobras, explica la agencia ANSA, tienen un rol disuasorio hacia el Norte, que las ve directamente como ataques, y se inician usualmente a fines de febrero o comienzos de marzo.
El miércoles 3/1 ya se había reactivado luego de 2 años la "línea roja" de comunicación directa desde el poblado de Panmunjom, entre Seúl y Pyongyang.
Poco después de que las conversaciones fueran anunciadas, el Presidente estadounidense, Donald Trump, intentó llevarse el crédito para el avance. Twitteó: "Con todos los fracasados 'expertos' opinando, ¿cree alguien realmente que las charlas y el diálogo estarían sucediendo entre Corea del Norte y del Sur ahora mismo, si yo no fuese firme, fuerte y dispuesto a comprometer toda nuestra 'fuerza' contra el Norte? Tontos, ¡pero las charlas son algo bueno!".
Kim Jong-un había dado la bienvenida a 2018 advirtiendo sobre el "botón nuclear" en su escritorio pero al mismo tiempo anunciando que estaba preparado para enviar una delegación de atletas a las Olimpiadas de Invierno en el Sur.
El Presidente surcoreano, Moon Jae-in -un liberal que favorece el diálogo con el régimen de Kim-, ha alentado la participación del Norte en los Juegos, con la creencia de que su presencia podría bajar las tensiones en la península.
Es mucho menos probable que Corea del Norte interrumpa las Olimpiadas lanzando un misil si hay atletas norcoreanos compitiendo, explicó el diario The New York Times.
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