POLÍTICA / MARIANO ROJAS EN "A 2 VOCES"
Mariano Martínez Rojas, de 37 años, y titular del Grupo M de Luxe, una empresa dedicada al desarrollo de negocios de entretenimiento, shows, deportes y servicios de promoción, marketing, publicidad y asesoramiento financiero, brindó este martes 30/08 en el programa "A 2 Voces" una entrevista desde Estados Unidos.
La charla comenzó con una fuerte declaración por parte del empresario Rojas. "En el día de hoy recibí amenazas pertenecientes a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) en la cual me dejaron un mensaje que decía que me esperarían en el aeropuerto de Ezeiza".
Las amenazas son normales, incluso me dijeron que iba a terminar como Nisman", afirmó, con cara de inocente.
Edgardo Alfano: -¿Alguien lo llamó y le dijo… "Soy de la PSA"?"
Rojas: -Lo sé porque conozco a la gente. Los voy a identificar en la Justicia.
Luego, la entrevista continuó con más declaraciones por parte de la supuesta "víctima", quien aseguró que las amenazas que recibe están vinculadas a sus dichos sobre los bolsos con dinero que iban a la provincia de Mendoza, con cierta colaboración de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, y no a su rol de posible empresario de baja credibilidad.
Rojas no piensa dejar USA ya que, según él, es el único lugar donde se encuentra protegido y desde donde piensa realizar sus declaraciones a la Justicia.
"Si voy para Argentina soy un muerto en el camino. No tengo ningún tipo de seguridad allá, por eso estoy acá", afirmó Rojas.
-¿Estás arrepentido?, prosiguió preguntando Alfano.
-La figura de arrepentido es muy amplia. Yo estoy hablando como alguien que trabajó con mucha gente. Lo que yo hice no fue ilegal porque eran divisas que se enviaban al exterior.
-¿De qué volumen está hablando usted sobre las operaciones legales?, indagó Marcelo Bonelli.
-Yo cuando te hablé de legales es porque la parte que trabajé para esta gente, e incluso todos los envíos, eran con amparo judicial.
En conclusión, Rojas afirmó que no piensa volver al país, se considera totalmente inocente y se muestra como una víctima del lavado de US$ 5 millones por los que lo responsabilizan.
Por su mano pasaron un total de 40 empresas que giraban un costo de US$140 mil diarios a través del Banco Patagonia.
Durante la entrevista de aproximadamente 10 minutos, él afirmó que era tan solo un empleado que cumplía con sus obligaciones e insistió en que todo lo que tocaba era absolutamente "legal".
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