martes, 21 de febrero de 2012

INVESTIGACIÓN

Si Proyecto X apunta a Aníbal, toca a Néstor y/o Cristina

Foto: Cristina Fernández de Kirchner en el edificio Libertador, junto al entonces jefe de Gabinete, Aníbal Fernández; la entonces ministra de Defensa, Nilda Garré; y el jefe del Estado Mayor Conjunto de las FFAA, brigadier general Jorge Chevalier. Foto: José Fernandez/Télam (06/07/2010).

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Microsoft Project es el software origen del denominado Proyecto X, desarrollado y comercializado por la empresa Microsoft.

El Project, un modelo de base de datos relacional, tiene un blog de actualización.


Tal como explicó el periodista Roberto García, en el regreso de su programa por Canal 26, La Mirada (por el evidente sobrepreso del conductor, él reconoció que le sugirieron cambiar el nombre por La Vista Gorda, pero lo rechazó "porque suponía excesivo oficialismo"), el Microsoft Project devenido en Proyecto X fue comprado por el Estado argentino y cargado en los centros informáticos de las fuerzas de seguridad nacionales durante la gestión de Aníbal Fernández al frente de ellas.

Aníbal Fernández fue ministro de Interior y Seguridad de Néstor Kirchner (2003-2007) y ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos en días de Cristina Fernández de Kirchner (2007-2009), quien -por consejo de Néstor, en ocasión de la crisis de gobierno con motivo de la derrota electoral 2009-, entonces lo designó jefe del Gabinete de Ministros de la Nación.

Fernández consiguió que la Presidente designara en su lugar a Julio Alak, quien aseguró que se mantuvieran los compromisos y preferencias de Aníbal, en especial sobre las fuerzas de seguridad de su incumbencia:

> Gendarmería Nacional,
> Policía Federal Argentina,
> Policía de Seguridad Aeroportuaria, y
> Prefectura Naval Argentina.

Durante su gestión en Interior, Aníbal Fernández mantuvo una guerrilla interna, en días de Néstor Kirchner, con la Secretaría de Inteligencia, de acuerdo a comentarios de cortesanos de la Quinta de Olivos. La cuestión era la provisión de información 'calificada' para el entonces Presidente (todo el affaire Iván Velázquez).

Más conocida es su disputa con José Ramón Granero, por entonces titular de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha Contra el Narcotráfico de la Nación (Sedronar), a causa de la política sobre represión de la ilegal producción y comercialización.

Aníbal Fernández mantuvo una dura puja con Nilda Garré en el inicio del 1er. mandato de Cristina Fernández ya que él apuntó a ir para el Ministerio de Defensa, donde Garré quería (y logró) permanecer. La Presidente lo envió a Justicia y Derechos Humanos y, por consejo de Néstor Kirchner, le sumó el control de las 4 fuerzas de seguridad.

¿En qué momento Aníbal implementó el Microsoft Project? Tendrá que informarlo Garré.

Curioso lo de Aníbal con Microsoft porque él fue defensor del sistema operativo Linux y el llamado software libre en la Administración Pública central.
Hay constancias periodísticas de que Fernández cuestionó el sistema operativo Windows y su paquete de aplicaciones de oficina Office y apostó por Linux durante una conferencia que ofreció en la Biblioteca Nacional, en ocasión de la 1ra. Conferencia Internacional de Software Libre de la Argentina (CISL2010 Argentina). Es evidente que aún faltan piezas en el rompecabezas.

Garré

En ocasión de la ocupación ilegal de tierras conocida como 'el caso Parque Indoamericano', Cristina Fernández, por consejo de Carlos Zannini, creó el Ministerio de Seguridad de la Nación, quitando a las 4 fuerzas de seguridad de la jurisdicción de Alak. Fue un duro revés para Aníbal Fernández, debatiéndose en los medios su pérdida de poder en el esquema de Cristina.

Hasta entonces, Garré seguía firme en Defensa.

Su mano derecha en el Ejército Argentino fue el general César Milani, director de Inteligencia. No es un dato menor a causa de las denuncias que ocurrieron acerca de la posibilidad que Milani realizara tarea de inteligencia doméstica.

Milani, en un hecho inédito en la historia del Ejército Argentino, ascendió a Subjefe del Estado Mayor del Ejército pero retuvo el cargo de Director de Inteligencia. Esa acumulación de cargos -incompatibles entre sí- es una prueba de la importancia política que tiene para el gobierno que Milani continúe al frente de la inteligencia castrense. 

Luego del Indoamericano, las 4 fuerzas de seguridad pasaron al nuevo ministerio, y Nilda Garré fue designada su titular.

Desde el inicio de su gestión, se exhibió un permanente cuestionamiento a las directivas implementadas por Aníbal Fernández, pretendiendo ignorar todos que ocurrió durante la gestión del Frente para la Victoria, en muchos casos con autorización de Néstor Kirchner y en otros de Cristina Fernández de Kirchner.

El más desubicado al respecto fue el asesor de Garré, Alberto Binder, vinculado al Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).

Cuando ocurrió el debate sobre el abandono de lugares de cobertura en Ciudad de Buenos Aires por la Policía Federal, Binder dijo: “La convivencia de la Metropolitana con la Federal es un híbrido que no va a llevar a ningún lado. Hay culpas compartidas: durante años de la gestión del ministro Fernández, cuando el fondo era la autonomía de la Federal, no se quiso nunca hacer un traspaso racional de la Policía”. 

¿Acaso él cree que Aníbal Fernández tomó esa decisión sin el conocimiento de Néstor Kirchner y/o Cristina Fernández? 
En verdad, hay un doble discurso del Frente para la Victoria que queda al desnudo y es lo que no se puede ocultar.

"No admitimos espionaje y si llegara a haber seremos inflexibles", aseguró la ministra Garré, cuya comparecencia ante el Congreso fue solicitada por diputados de la oposición, pero ella rechazó ir, al menos por ahora.
A través de la red social Twitter, Garré aseguró que el Gobierno de Cristina Fernández sostiene "una clara posición respecto a la no criminalización de la protesta social y límites a la acción policial".

Dudas

Roberto García planteó varias dudas:

> Proyecto X se desarticula en Gendarmería Nacional ¿y en las otras fuerzas de seguridad?

> ¿Cuál es el alcance de la información almacenada en todas las bases de datos de Proyecto X? 

> ¿Será destruida la base de datos? ¿Quién auditará que esa destrucción resulte cierta?

> ¿Cuál sera la base de datos de reemplazo que implementará la Nación?

> ¿Quién verificará que con esa nueva base de datos no ocurra lo mismo que con Proyecto X?

> ¿Puede realmente haber tomado desprevenida a Garré la información sobre el Proyecto X? De acuerdo al periodista, el Nº2 de la ministro, Gustavo Ariel Sibilla, conocía de la existencia de la base de datos.

Gustavo Ariel Sibilla es secretario de Planeamiento del Ministerio de Seguridad de la Nación, luego de haber sido secretario de Estrategia y Asuntos Militares del Ministerio de Defensa cuando Garré estuvo al frente de esa cartera.

Licenciado en Finanzas por la UADE, Sibilla se desempeñaba como subsecretario de Planificación Logística en Defensa pero Garré confió en él y lo designó en lugar de Germán Montenegro.

En Seguridad, Sibilla se atribuye el éxito de

> Proyecto Buenos Aires Ciudad Segura (sistema integrado de seguridad urbana en la Ciudad de Buenos Aires, Centro de Comando y Control unificado).

> Programa de Modernización de la Investigación Científica del Delito. Ahí aparece el tema de las bases de datos. De Sibilla dependen desde la proyección federal del Sistema de Identificación Biométrica para la Seguridad (SIBIOS), el Sistema Federal de Identificación Balística automatizada (SIAB) y el Sistema de Investigación de Delitos contra la Integridad Sexual (SIDIX), hasta una arquitectura integrada de hardware y software para las Fuerzas policiales y de seguridad (nacionales y provinciales).

> Programa de Desarrollo Tecnológico Nacional para la Seguridad Pública. Lanzamiento de proyectos de investigación, desarrollo y producción nacional de componentes y dispositivos críticos para las fuerzas policiales y de seguridad. 

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