Sobre Aníbal Fernández empiezan a cerrarse las pinzas de los crímenes narco: por un lado el de General Rodríguez por el cual fue detenido en Paraguay Esteban Ibar Pérez Corradi (se espera su extradición en los próximos días o semanas) y ahora el del Shopping Unicenter, porque se secuestró un arma perteneciente al exlíder de Hinchadas Unidas Argentinas, Marcelo Mallo, también exbarrabrava del club Quilmes y señalado como puntero político de San Francisco Solano ligado al exjefe de Gabinete de Cristina Kirchner.
El gobierno de Mauricio Macri sabe que el tema de la corrupción K sigue interesando a la sociedad argentina, especialmente porque con el cambio de gobierno espera que las causas abiertas avancen y se llegue a alguna condena, además de la devolución de lo robado.
Por eso, Cambiemos fogoneó en el Congreso el rápido tratamiento de las leyes del arrepentido y la extinción de dominio que se aprobaron ayer (23/6) en la Cámara de Diputados, al calor del escándalo de los bolsos con dinero que José López arrojó al convento de General Rodríguez.
Se espera que la primera iniciativa (ambas deben ser sancionadas aún por el Senado) posibilite también alguna confesión de Esteban Ibar Pérez Corradi, detenido en Paraguay la semana pasada y cuya extradición se espera para los próximos días o semanas.
La detención de Pérez Corradi reactivó la causa por el Triple Crimen de General que implica a Aníbal Fernández por su responsabilidad en el ingreso de la efedrina al país. Un movimiento de pinzas se cierne sobre Aníbal.
Porque mientras se espera el arribo al país de Pérez Corradi, en la provincia de Buenos Aires quedó vinculado al doble crimen narco en el Shopping Unicenter, ocurrido en 2009. La vinculación surgió por un arma secuestrada al exlíder de Hinchadas Unidas Argentinas, Marcelo Mallo, y que se usó en los asesinatos en el centro comercial de Martínez.
El fiscal general que intervino en el caso, protegido por la procuradora Falbo, está suspendido por encubrimiento. El diario Hoy recuerda que a fines del año pasado, la fuga de los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci del penal Nº 30 de General Alvear hizo que la procuradora general de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, María del Carmen Falbo, quedara en el medio de la polémica por sus estrechos lazos con el exjefe de Gabinete, Aníbal Fernández.
En el marco de la resolución de la huida de los prófugos, la Justicia dictaminó una serie de allanamientos, entre ellos al domicilio del exlíder de la agrupación Hinchadas Unidas Argentinas (HUA), Marcelo Mallo, un dirigente cercano al fallido candidato a gobernador, donde se secuestraron dos armas de fuego.
Ayer (23/6) se dio a conocer la información de que una de las dos pistolas calibre 40 incautadas en dicho procedimiento judicial fue usada en el doble crimen de Unicenter de Martínez en julio de 2008, cuando sicarios asesinaron a sangre fría a dos narcos colombianos en la puerta del famoso shopping.
Mallo, un ex barrabrava del club Quilmes y puntero político de San Francisco Solano ligado a Aníbal, es un hombre con un largo historial en la Justicia por hechos de diversa índole, estando su nombre involucrado en las causas que se siguen por el tráfico de efedrina y el Triple Crimen de General Rodríguez.
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