POLÍTICA

CRISTINA NO PUEDE DESCANSAR EN PAZ

La Campora en Santa Cruz y cómo dar vuelta la agenda en un suspiro

 Poco duró la tranquilidad que había conseguido Cristina Fernández con el discurso que dio sobre su enfermedad. No fue la 'opo' -como le gusta decir al kirchnerismo- la que encendió la mecha en Santa Cruz, sino La Cámpora. Aún se desconoce si la mandataria podrá descansar en su "lugar en el mundo", donde hoy es terreno peligroso para ella.  

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) En el discurso que dio el miércoles (28/12) después de que se informara el  martes en la noche (27/12) que la presidente Cristina Fernández tiene cáncer en la  tiroides, la mandataria pidió enfáticamente ayuda a todos los funcionarios y  argentinos para mantener la calma durante su ausencia.

En primera fila, estaban los dirigentes de La Cámpora, la organización  política juvenil fundada por su hijo, Máximo Kirchner. Aplaudían. Sin embargo  ese día aún no había muestras de que al día siguiente (jueves 29/12)  integrantes de la misma agrupación iban a darle el peor dolor de cabeza a la  mandataria, que los defiende con uñas y dientes: prender fuego la Santa Cruz  que la estaba esperando para llegar a su descanso. Ese mismo que no se "toma  desde lo de Néstor". Ese mismo que necesita para tener tranquilidad apenas  unos días antes de someterse a la operación de una enfermedad que ni siquiera  se anima a nombrar. La Cámpora en Santa Cruz, se llevó, en apenas horas, toda  la tranquilidad que ella había conseguido con ese discurso que fue elogiado  por todos. Podía tomarse enero, tenía la tranquilidad garantizada al menos  durante un mes. Hasta Hugo Moyano bajó la guardia e iba a tomarse un descanso  en verano, hasta volver al ruedo nuevamente. 

Pero no. La Presidente suspendió el viaje, porque su propia provincia, ese  "lugar en el mundo" donde ella descansa, según recordó en el mismo discurso,  hoy es un lugar hostil para ella misma, que necesita descansar. Santa Cruz,  la tierra de los Kirchner, tiene serios problemas dentro del mismo seno del  Frente para la Victoria, entre el gobernador puesto por los Kirchner y La  Cámpora, que comanda el hijo mayor. Lo curioso es que no fue la oposición  quien encendió la mecha: el problema viene del mismo riñón.

Anoche, medio gabinete presentó su renuncia. Entre ellos, los ministros de  Producción, Jaime Alvarez; de Salud, Hernán Martínez Crespo; el secretario  general de la Gobernación, Francisco Anglesio, que pertenece a La Cámpora,  igual que el director de Canal 9, Martín Hernández, que también dimitió. A  ellos se les sumó la interventora de la Caja de Servicios Sociales, Liliana  Korenfeld.

Daniel Peralta anoche se debatía en su vivienda del Barrio del Carmen, apenas  acompañado de su familia y sin ningún ministro, cómo hacer frente a la peor  crisis de su gobierno en medio de insistentes versiones de renuncia.

En Buenos Aires, Cristina se agarraba la cabeza y los retaba como chicos:  cómo puede ser que en menos de 24 horas la agenda cambio completamente. Aún  se desconoce si la mandataria podrá viajar, la expectativa se centra sobre  eso. Lo cierto es que Cristina todavía no puede descansar.