Su primera víctima le había escrito una carta al magistrado. Rubén Galera fue detenido el martes. Está acusado de haber violado a una chica de 22 años, Josefina, a principio de mes.
Sin embargo, no fue ella su primera víctima. Estaba en libertad condicional después de haber cumplido 12 de los 16 años y medio de condena por otra violación.
Pasaron 13 años desde entonces. Pero el daño para Juana, la joven que hoy tiene 30 años, es irreparable.
El juez de Ejecución Penal, Juan Galarreta, fue quien lo liberó por buena conducta. No tuvo en cuenta, evidentemente, que en 2014 y estando preso en Batán, Galera también intentó abusar de una radióloga.
Tres mujeres, todas víctimas del mismo hombre. Cuando a fines del año pasado Juana supo que iban a liberar a su violador, fue a ver al Juez.
"Fueron cinco meses de agonía y no pude evitarlo", le dijo a Noticiero Trece.
“Le dije que estaba soltando a una fiera, le pregunté dónde estaba la buena conducta si este sujeto no se puede contener ni dentro del penal y me dijo que era inocente hasta que se demostrara lo contrario”, le contó la joven al diario Clarín.
Galera salió de la cárcel y fijó domicio en Miramar. En la misma ciudad donde vive ella. En el mismo lugar donde la violó. Entonces Juana publicó en su perfil de Facebook una carta directamente dirigida al Juez. Porque para ella, su violador y el juez son lo mismo.
“Él también me arruinó la vida", le dijo al mismo diario. "Logró la libertad condicional porque así lo otorga la ley", explicó por su parte el magistrado para justificar su decisión, y responsabilizó al Estado. Tal vez, si su decisión hubiera sido otra, hoy Josefina no sería también una víctima.
LA CARTA
“Señor juez Galarreta me dirijo a usted con respeto porque soy educada, pero no porque le tenga respeto… yo fui violada y torturada 6 horas dentro del vivero de Miramar por el condenado Rubén César Galera al cual usted le dio la libertad sabiendo aún que intentó abusar sexualmente dentro del penal de Batán a la srta María… seguramente para darle la libertad y ponerme a mi en peligro largándomelo a cuadras de mi casa.
No debe haber leído ni un poquito de lo que esta bestia hizo conmigo: me torturó, me violó muchassss veces, me lastimó, me cortó, me psicopateó y me dejó tirada en un arroyo y lo resumo porque me hizo millones de cosas más”.
“Juana, María y Josefina –dice ahora la joven–. Ya somos tres, tres por el mismo hombre, dos gracias al juez”. (tn.com)
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