Foto: Archivo |
Se trata del fiscal de Delitos Complejos del Departamento Judicial de Mercedes, Juan Bidone, quien aseguró en declaraciones a radio Continental que "desde el primer día (Pérez Corradi) gozaba de la protección de algunas personas, más allá de su capacidad económica que le permitía mantenerse en la clandestinidad".
Además, explicó que en la causa obtuvieron información de que el sospechoso "pertenecía a algún grupo de inteligencia y que eso le permitía tener protección", y explicó que no le sorprendió que la detención se haya producido en la Triple Frontera, ya que "era un lugar conocido por él y porque por allí ingresaba la efedrina de manera ilegal".
"Nosotros tenemos acreditado que Pérez Corradi es el dueño del móvil (del triple crimen), está comprobada su relación con el tráfico ilegal de efedrina por aquellos años 2007 o 2008, tenemos comprobado que él proveía efedrina a los mexicanos, que estaban en nuestro país en ese laboratorio que funcionaba en Ingeniero Maschwitz", aseguró Bidone.
"Él entra en conflicto con el grupo de Sebastián Forza (una de las víctimas del triple crimen junto a Leopoldo Bina y Damián Ferrón) por querer ser los únicos proveedores de los mexicanos, sabía de las intenciones de Forza de desplazarlo de este mercado y su relación con al menos dos de los condenados" por los asesinatos, dijo el fiscal.
Luego, Bidone agregó que, a su criterio, el detenido no va a colaborar con la investigación que lleva adelante. "A nosotros nos pagan por sospechar y uno tiene que investigar descontando que el imputado vaya a decir algo de verdad, pero uno tiene que pensar que no va a lograr la colaboración del imputado. Es difícil pensar que vaya a prestar colaboración, pero también es cierto que hoy tiene una pena que posee una expectativa de cumplimiento muy alta. Quizá eso lo motive para aclarar algunas cosas", dijo. (Télam)
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