(U24) - El Gobierno nacional tuvo dos grandes olvidos cuando lanzó su paquete de medidas económicas para paliar los efectos del dólar a $60 tras las PASO: los jubilados y los deudores hipotecarios. Para los últimos hubo beneficios que luego anunciaron los ministros del gabinete, pero para los primeros sólo hubo el recordatorio de que cobrarán el aumento por movilidad de septiembre, algo que ya estaba previsto.
Pero además de los haberes, los jubilados –aunque no exclusivamente ellos- tienen otro gran problema: el precio de los medicamentos y los servicios del PAMI. Por eso, los representantes de la Federación Argentina de Farmacias (FACAF), que nuclea a más de 5.000 farmacias en todo el país, pidieron este jueves (22/8) a las autoridades del PAMI que los afiliados de esa obra social "mantengan el acceso a los medicamentos".
En un comunicado, detallaron que a través de una nota enviada por el presidente de a FACAF, Miguel Angel Lombardo, al presidente del PAMI, Sergio Casinotti, la Federación solicitó que "se lleven adelante medidas para garantizar la sustentabilidad del convenio con el Instituto" y de esa forma “preservar el acceso de los afiliados a los medicamentos”.
La entidad convocó además, a una reunión "con todos los integrantes de la cadena de valor para analizar la situación derivada de la reciente devaluación que se registró en las últimas semanas". La misiva instó a “reflejar las dificultades que tiene las farmacias en reponer su stock debido a las características del convenio suscripto con PAMI”.
Esa federación, en calidad de representante de la dispensa farmacéutica y prestador para el convenio PAMI solicita, además, que se “arbitren los medios y medidas necesarias para salvaguardar al convenio mencionado que nos vincula porque de ese modo protegemos a la cadena de valor del medicamento que tanto da a la sanidad de Argentina y en especial a los afiliados del PAMI”.
Remarcan que “el pedido radica en los drásticos cambios producido en el país luego de las elecciones PASO que son de público conocimiento, y que han llevado a que las actuales condiciones económicas que rigen, con devaluación y tasas para financiarse que superan el 75% anual, hacen imposible la prestación”.
Para los farmacéuticos, según la nota enviada a las autoridades de PAMI, “lo más trascendente para la vida del convenio prestacional es solucionar la brecha existente entre los nuevos precios de venta al público de los medicamentos y el precio PAMI que ha llegado a los límites que supera todo tipo de sustentabilidad para la prestación farmacéutica, generando para muchos de los productos dispensados del vademécum quebrantos mayores al de 48 puntos porcentuales”.
También describen que “según nuestras mediciones el promedio diferencial del precio entre el valor de venta al público y el precio PAMI es de 28 puntos porcentuales, teniendo en lo más alto de la tabla diferencias que rondan el 48% entre un precio y otros, cuando el compromiso asumido por la obra social era que el mismo no superaría 15% promedio para todas las presentaciones del vademecum”.
Otro tema que preocupa es “la condición de plazo de pago”, ya que por los aumentos registrados existirá “un quebranto financiero imposible de soportar por las farmacias” en el marco de las “actuales condiciones del sistema financiero argentino”.
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