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| ALFONSO PRAT GAY |
La semana del 25 de enero el Gobierno nacional presentará sus propuestas de pago a los holdouts. Trascendió que la primera oferta consistiría en bonos a largo plazo para canjear los títulos en default con una quita del 30% en los intereses pero reconociendo el 100% del capital. A su vez, se ofrecerán nuevos bonos por nuevo financiamiento.
El equipo económico de Alfonso Prat-Gay espera una negociación dura, por eso quiere primero preparar el terreno. Para eso tomará en los días siguientes dos medidas: licitará una ampliación del Bonar 2020 por US$ 1000 millones mientras intenta un canje de bonos con vencimiento en 2017 por la misma serie que licita y que vencen tres años más tarde. Luego, tratará de presentarse en el foro de Davos como un país con intención de negociar, pero apoyado en la licitación de los Bonar buscará mostrar a la vez que no tiene desesperación por acordar con los holdouts y que puede conseguir financiamiento no embargable.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- Cuenta regresiva para el equipo económico del ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, para presentarle una oferta de pago a los holdouts.
La semana del 25 de enero se conocerá la propuesta del gobierno argentino que trascendió que consistiría en una quita del 30 por ciento sobre los intereses reconociendo el 100% del capital en bonos a largo plazo para canjear esos títulos en default y ofrecer nuevos bonos. Pero antes, Prat-Gay quiere ir preparando el terreno de una negociación que espera que sea muy dura.
El diario El Cronista plantea este lunes (18/01) dos escenarios previos a la negociación con el objetivo de mostrar su escaso poder de fuego contra una sentencia ordenada por el juez,Thomas Griesa, de pagar el 100% de los bonos en default.
Por un lado, licitará una ampliación del Bonar 2020 por US$1000 millones al mismo tiempo que intentará canjear bonos con vencimiento en 2017 por la misma serie que licita y vencen tres años más tarde. La idea con esta medida es demostrar “a los buitres que en el corto plazo el país consigue financiamiento sin que se lo puedan embargar", cita a una fuente del Gobierno el matutino.
Luego, en el Foro de Davos que se realiza en Suiza entre jueves y viernes próximos y que contaría con la presencia del presidente, Mauricio Macri (aunque no está claro si sus médicos lo dejarán viajar por su lesión en la costilla) y de Prat-Gay, el país intentará mostrarse con intención de negociar y honrar sus deudas.
En el equipo de Prat-Gay consideran que la negociación será dura porque la Argentina no está dispuesta a llegar a cualquier acuerdo. Si bien quieren cerrar rápido con los buitres, la realidad es que hay tiempos que el Gobierno necesita, asegura El Cronista.
En tanto, el portal Infobae revela que según un reporte a clientes del banco de inversión JPMorgan, la oferta oficial de la Argentina consistiría en bonos a largo plazo para canjear esos títulos en default, con una quita del 30% en los intereses, reconocerle el capital al 100%, y tentarlos con nuevos bonos para que suscriban nuevo financiamiento (o sea dólares frescos contantes y sonantes).
Según el informe de JPMorgan que cita el portal de noticias, la quita que podría aplicar Hacienda al monto que reclaman los holdouts sería de un 20% o 30% sobre los intereses. Vale recordar que de los US$ 9.800 millones que están en litigio, el 70% corresponde a los intereses y punitorios y sólo el 30% al capital de los bonos.
Por ende, sabe Prat Gay y el secretario de Finanzas, Luis Caputo que ese 30% es intocable. Si hay poda posible será sobre los intereses. Si bien se mantiene todo con mucho hermetismo, Caputo tuvo reuniones positivas con los holdouts que estuvieron la semana pasada en el despacho de Pollack. Se dice que eran bonistas que representaban algo así como USD 8.000 millones de la deuda, o sea la gran mayoría (los que ganaron el juicio como Elliott y Aurelius y los denominados mee too).
En tanto, la oferta dependerá del Congreso y de las mayorías que Macri haya logrado tejer mientras el parlamento se encontró cerrado. Como la propuesta a los holdouts será superadora a lo ofrecido en los canjes anteriores, se necesita cambiar la Ley Cerrojo, que prohíbe al Poder Ejecutivo reabrir o mejorar la oferta en el proceso de canje de bonos en cesación de pagos.
Prat Gay explicó el 13 de enero pasado que en 2001, juntando el juicio original de la clausuraPari Passu e incorporando los denominados "me too", la deuda era de 2.943 millones de dólares. Sin embargo, la última sentencia y la falta de pago de parte de la gestión kirchnerista elevó la cifra a 9.882 millones de dólares.
Esto no incluye a los bonistas europeos. "Es el costo de lavarse las manos", disparó Prat Gay sobre lo realizado por el kirchnerismo. El funcionario expresó que el cumplimiento del fallo a favor de los holdouts en el juzgado de Thomas Griesa "es un tema que hay que resolver, no vamos a mirar al costado ni hacer falsa política".
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