Foto: Vicegobernador José Cáceres y gobernador Sergio Urribarri
PARANÁ (U24 Entre Ríos). Contrariamente a lo que se suponía, la realización de la Cumbre del Mercosur prevista para realizarse entre los días miércoles 17/12 y jueves 18/12, está teniendo cada día más y más oposición por parte de los paranaenses, a medida que se van conociendo detalles de la organización.
A la ya mencionada por U24 Entre Ríos decisión de adelantar la finalización del ciclo lectivo en al menos dos establecimientos con escolaridad primaria y secundaria, para utilizar las instalaciones de los mismos, ahora se supo que quienes vivan en los alrededores de los lugares donde se alojarán los mandatarios y se realizarán las deliberaciones, tendrán que convivir con medidas de seguridad que apenas les darán la posibilidad de movilizarse de forma muy limitada.
Si bien la mayoría de los millonarios gastos de organización correrán por cuenta del gobierno nacional, a nadie escapa que tanto los gobiernos provincial y municipal, deberán hacer erogaciones no previstas en sus presupuestos.
El provincial ya fue autorizado mediante una ley especial para realizar contrataciones y gastos sin necesidad de licitaciones. El municipal ha enviado un proyecto de ordenanza al Concejo Deliberante en el mismo sentido.
El tema de la seguridad es sin embargo lo que más le preocupa a los organizadores, y todo lo que en ese sentido se está planeando, ya le ha puesto los pelos de punta a muchos paranaenses por lo que representa el enorme despliegue de más de 5.000 efectivos (entre policía provincial, fuerzas armadas, gendarmes, policía federal, bomberos, brigadistas y custodias propias de cada jefe de estado), por las calles de Paraná.
La capital de Entre Ríos está convulsionada y sus habitantes molestos por las consecuencias de un capricho que algunos señalan como el “premio consuelo” para el gobernador, Sergio Urribarri, ya que la Presidente le habría ordenado retirar su candidatura a sucederla.
A aquél “sueño entrerriano”, Cristina Fernández lo compensaría permitiéndole la organización de esta cumbre. No es un premio menor habida cuenta de las posibilidades “financieras” que la misma permitiría.
Por eso, así como hay una mayoría disconforme, también existe una gran cantidad de aprovechadores y de oportunistas que ven como una gran oportunidad la realización de esta cumbre. Son los encargados de movilizar a los “militantes” y los mismos “movilizados” que ya estarán evaluando cuanto serán los “honorarios” que habrá que cobrar para un evento internacional de estas características.
No es lo mismo ir a aplaudir entre propios, que hacerlo delante de tantos presidentes y de tanta prensa extranjera. También hay algunos que contando con la vista gorda de muchos funcionarios piensa“facturar” por otras actividades más colaterales pero no menos rentables.
Es que además de los mandatarios, habrá una impresionante cantidad de funcionarios, secretarios, custodios, etc., que requerirán “servicios adicionales”, que dejarán una renta muy importante. Por todo eso los ciudadanos de Paraná han empezado a manifestarse a través de las redes sociales para expresar su disconformidad con la realización de la cumbre.
A ellos no les interesa que la ciudad no tenga un aeropuerto que no pueda recibir las aeronaves de algunos presidentes, no les interesa que no haya capacidad hotelera, ni que no haya conexiones para comunicaciones adecuadas, porque saben que cuando se quiere esas cosas se solucionan.
Lo que quieren los paranaenses es que les solucionen los problemas con los que conviven todos los días y no que se los agraven solo porque se le deba dar el gusto a un capricho del gobernador.
En las redes sociales señalan: “Queremos organizar una Cumbre del Mercosur cuando estemos en condiciones de poder recibir a nuestros hermanos como se merecen. De ninguna manera queremos ser parte de un mamarracho”.
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