ALBERTO MANGUEL |
El intelectual, reconocido a nivel mundial y con obras traducidas a 30 idiomas, regresará al país para suplantar a Horacio González a partir de julio de 2016
El gobierno de Mauricio Macri comunicó hoy que Alberto Manguel será el nuevo director de la Biblioteca Nacional. El cargo se sabía vacante desde el momento en que Horacio González avisó, en julio de 2015, que no seguiría al frente de la institución, independientemente de quién se alzara con el triunfo en las elecciones presidenciales.
El ministro de Cultura, Pablo Avelluto, le había pedido a González en las últimas horas que continúe como director hasta que se nombre a su sucesor. Y aunque ahora se conoce su nombre, la cartera informó que Manguel tomará la posta en julio de 2016.
"Manguel es uno de los intelectuales argentinos con mayor reconocimiento en el exterior y, además, una de las personas que más saben en el mundo sobre bibliotecas. Tiene dos virtudes que rara vez se encuentran en la misma persona: es un eximio escritor y, al mismo tiempo, un gestor cultural experto en el campo de la bibliotecología", destacó Avelluto, quien consideró que al elegido "la Argentina todavía no le ha brindado todo el reconocimiento que se merece".
El intelectual regresará al país luego de décadas de vivir en el exterior. Dejó la Argentina en 1969, y vivió en Francia, Inglaterra, Italia, Tahití y Canadá, donde trabajó como editor y lector para casas editoriales.
Actualmente reside en Nueva York. "Me siento profundamente honrado por este cargo: la lista de directores previos me intimida y me desafía", afirmó Manguel.
Escritor, editor y profesor de literatura y filosofía en las instituciones educativas y casas editoriales más relevantes de los idiomas español, inglés, francés, alemán e italiano, Manguel tendrá como misión liderar "una nueva gestión marcada por la inclusión, la innovación y la federalización de las políticas de la entidad", indicó la nota.
"La nueva dirección de la entidad propone ponerse al servicio tanto de los lectores actuales –en su formación y estímulo– como de las generaciones futuras promoviendo el fortalecimiento de las políticas de conservación del patrimonio y ampliando los procesos de digitalización de los materiales", señaló el texto.
Y agregó que se buscará "expandir sus alcances al tomar como soporte de expresión cultural no sólo al libro como objeto físico sino también la amplia variedad de expresiones a través de las cuales la comunidad ha dado testimonio de su experiencia y poder imaginativo".
Con esta designación, el ministerio que comanda Avelluto "se propone impulsar el posicionamiento estratégico de la entidad en el contexto internacional, buscando de esta manera fomentar intercambios y articulaciones con otras instituciones del mundo y América Latina ofreciendo un valioso acervo de nuestra cultura local hacia el exterior".
Y también "continuar con los proyectos abocados al estudio y la difusión de las diferentes expresiones de la cultura popular y las lenguas y literaturas indígenas". En una carta difundida ayer en el diario Página 12, González pidió que la Biblioteca Nacional no sea conducida por "intereses corporativos".
Y planteó que será necesario que se sancione la Ley de la Biblioteca Nacional, que ya cuenta con media sanción en la Cámara de Diputados, así como el perfeccionamiento de "la Escuela de Bibliotecarios" y la continuidad de las obras en el anexo Borges-Groussac, antigua sede de la biblioteca madre de la Argentina.
QUIÉN ES EL NUEVO DIRECTOR DE LA BIBLIOTECA NACIONAL
Nacido en Buenos Aires en 1948, Manguel creció en Tel-Aviv, donde su padre se desempeñó siendo el primer embajador argentino en Israel. A los siete años de edad, cuando su familia regresó a Argentina, comenzó a hablar fluidamente español, siendo sus lenguas madre el inglés y el alemán (que hablaba con su institutriz).
A los 16 años, mientras trabajaba en la librería Pygmalion, en Buenos Aires, conoció a Jorge Luis Borges, que ya ciego le pidió, como a tantos otros, que leyera para él en voz alta en su casa.
Cursó la escuela secundaria en el Colegio Nacional de Buenos Aires donde dijo que le "enseñaron todo o casi todo" lo que lo formó como lector.
Dejó la Argentina en 1969, al inicio de lo que sería la época más trágica del país, y vivió en Francia, Inglaterra, Italia y Tahití, trabajando como editor y lector para casas editoriales.
En Italia, junto a Gianni Guadalupi, escribió la Guía de lugares imaginarios, su primer éxito internacional. En 1982 se instaló con su familia en Toronto, Canadá, donde vivió durante unos quince años, trabajando para la radio y la televisión canadienses.
En 1992, su primera novela, Noticias del extranjero, ganó el premio McKitterick en Inglaterra. Sus ensayos más importantes, traducidos a más de treinta idiomas, son Una historia de la lectura, La biblioteca de noche, Diario de lecturas y Curiosidad: una historia natural.
Por sus trabajos sobre el tema de la lectura, George Steiner ha dicho que Manguel es "el Don Juan de las bibliotecas".
Entre los reconocimientos que ha recibido están los doctorados honorarios de las universidades de York y Ottawa en Canada, de Liege en Bélgica, y de Anglia Ruskin Cambridge en Inglaterra, los premios Garzanti Cavour en Italia, Germán Sánchez Ruipérez en España, France-Culture, Roger Caillois, y el Médicis Ensayo en Francia.
Le ha sido otorgadas la medalla al mérito de la Ciudad de Buenos Aires y la Orden de comandante de las Artes y las Letras en Francia.
Es miembro de la Academia Argentina de Letras, de la Fundación Guggenheim en Estados Unidos, y de la Royal Society of Literature en Inglaterra. Sus ensayos aparecen regularmente en periódicos del mundo entero. (infobae.com)
No hay comentarios:
Publicar un comentario