En diciembre pasado, el parlamento porteño disolvió la Agencia de Bienes SE, que había sancionado un año y medio atrás. Dicho organismo generó controversia porque desde el GCBA buscaban vender unos 2000 terrenos públicos de la Ciudad en desuso.
No sólo generó rechazo de la oposición, con la fractura del peronismo con La Cámpora, sino de los propios aliados del PRO. La Coalición Cívica votó en contra, por ejemplo.
Horas atrás trascendió el motivo por el cual dicha agencia se disolvió sin vender un solo inmueble: evitar el pago de Ganancias del 35% por operación a la AFIP, por tratarse de una Sociedad del Estado.
Al menos así lo reafirmaron fuentes del Gobierno porteño a Urgente24. Resulta curioso que nadie se percatara de este detalle, sobre todo cuando se necesitó un acuerdo político del PRO con la oposición para sancionar la norma, ya que necesitó 40 votos.
En rigor, la información revelada por el matutino La Nación también expone la cantidad (y calidad) de sueldos innecesarios que generaría la agencia. De acuerdo a la ley, la Agencia de Bienes debía estar integrada por un presidente y un vicepresidente, tres vocales y cinco vocales suplentes designados por el Poder Ejecutivo, más dos miembros restantes designados por la Legislatura de acuerdo con la representación de los bloques políticos opositores.
Pero la nueva política de austeridad en materia de gestión del gobierno nacional, replicada en CABA, no iba en ese sentido. Es que se destinaba nada menos que un presupuesto de $40 millones, repartido entre 25 empleados. Muchos de esos empleados irán al Ministerio de Modernización porteño.
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