Clausura 2011
Independiente le ganó a Colón y respira
El Rojo quiere olvidarse de la promoción luego de la victoria ante Olimpo. Colón llega dulce tras la goleada a Huracán.
Independiente de la mano de su talentoso armador Patricio Rodríguez alivió esta noche su situación en la tabla de los promedios al batir a Colón de Santa Fe 3-1 en el Estadio Libertadores de América.
Patito Rodríguez además de ser vital y el mejor convirtió uno de los goles para el local y los otros dos los aportaron Facundo Parra y Andrés Silvera, el Cuqui sobre el final de este partido correspondiente a la decimoquinta fecha del torneo . El descuento para Colón lo había marcado Esteban Fuertes.
Con este resultado respira con mayor comodidad en la tabla de los promedios y de paso se ubicó a seis de la cima del Clausura, la que comparten de momento Vélez Sarsfield y Godoy Cruz.
Independiente jugó un primer tiempo brillante de la mano del Pato Rodríguez, una figura cada vez más excluyente dentro del equipo que dirige Antonio Mohamed, aunque en la ocasión el Rojo también contó con facilidades por las limitaciones del adversario de turno, incapaz de molestar a Hilario Navarro en toda la etapa inicial.
Es más, Colón desprotegió mucho su propia meta, a pesar de que salió a jugar en su propìo campo para tratar de cerrarle los caminos a Independiente.
El local intentó ser siempre prolijo. A diferencia de lo que había sucedido en la primera parte de este mismo torneo, tiene en Rodríguez a un constructor definido y responsable, cada vez más apto para ponerse el equipo al hombro, tanto para desequilibrar y convertir como para hacer jugar a sus compañeros.
El anfitrión encontró el mejor camino por el lado izquierdo valiéndose de la sociedad Rodríguez, Maximilianio Velázquez y Hernán Fredes. Así no tardó en sacar dos goles de ventaja y estuvo a punto de marcar el tercero antes del cierre del primer capítulo.
Colón fue muy especulativo, frágil en defensa y con problemas para recuperar el balón en todas sus líneas. Esta vez no encontró liderazgo en Damián Díaz y por eso el conjunto quedó desconectado. El primer tanto se produjo a los 19 porque Rodríguez mandó un centro magistral desde la izquierda al primer palo, cabeceó Parra y la pelota ingresó junto al ángulo.
En el segundo se escapó Patricio de nuevo, ingresó en el área, desacomodó a la defensa con un enganche y desde un ángulo cerrado reventó el arco de Diego Pozo.
En el que pudo haber sido el 3-0, a los 46, Pozo le ganó una pelota dividida a Maxi Velázquez, pero al salir a buscar el rebote fuera del área fue eludido por Patito, quien se sacó de encima también al paraguayo Salustiano Candia y disparó, pero apareció el boliviano Ronald Raldes para evitar la conquista sobre la línea.
En la segunda etapa Independiente cometió el error habitual de replegarse para intentar aprovechar el contraataque y le permitió así reaccionar a Colón que en un intento aislado consiguió el descuento por intermedio del Bichi Fuertes.
Se hizo entonces un juego de ida y vuelta y el Sabalero hasta pudo haber empatado, aunque sin merecerlo.
A los 32 minutos Joaquín Larrivey desaprovechó lo que pudo haber sido la igualdad y, a los 38, Parra metió un tiro en el poste derecho que pudo haber precipitado la tranquilidad roja. Recién a los 41 el oportunismo de Silvera cerró el triunfo de Independiente y acabó con el suspenso.
minutouno.com
Patito Rodríguez además de ser vital y el mejor convirtió uno de los goles para el local y los otros dos los aportaron Facundo Parra y Andrés Silvera, el Cuqui sobre el final de este partido correspondiente a la decimoquinta fecha del torneo . El descuento para Colón lo había marcado Esteban Fuertes.
Con este resultado respira con mayor comodidad en la tabla de los promedios y de paso se ubicó a seis de la cima del Clausura, la que comparten de momento Vélez Sarsfield y Godoy Cruz.
Independiente jugó un primer tiempo brillante de la mano del Pato Rodríguez, una figura cada vez más excluyente dentro del equipo que dirige Antonio Mohamed, aunque en la ocasión el Rojo también contó con facilidades por las limitaciones del adversario de turno, incapaz de molestar a Hilario Navarro en toda la etapa inicial.
Es más, Colón desprotegió mucho su propia meta, a pesar de que salió a jugar en su propìo campo para tratar de cerrarle los caminos a Independiente.
El local intentó ser siempre prolijo. A diferencia de lo que había sucedido en la primera parte de este mismo torneo, tiene en Rodríguez a un constructor definido y responsable, cada vez más apto para ponerse el equipo al hombro, tanto para desequilibrar y convertir como para hacer jugar a sus compañeros.
El anfitrión encontró el mejor camino por el lado izquierdo valiéndose de la sociedad Rodríguez, Maximilianio Velázquez y Hernán Fredes. Así no tardó en sacar dos goles de ventaja y estuvo a punto de marcar el tercero antes del cierre del primer capítulo.
Colón fue muy especulativo, frágil en defensa y con problemas para recuperar el balón en todas sus líneas. Esta vez no encontró liderazgo en Damián Díaz y por eso el conjunto quedó desconectado. El primer tanto se produjo a los 19 porque Rodríguez mandó un centro magistral desde la izquierda al primer palo, cabeceó Parra y la pelota ingresó junto al ángulo.
En el segundo se escapó Patricio de nuevo, ingresó en el área, desacomodó a la defensa con un enganche y desde un ángulo cerrado reventó el arco de Diego Pozo.
En el que pudo haber sido el 3-0, a los 46, Pozo le ganó una pelota dividida a Maxi Velázquez, pero al salir a buscar el rebote fuera del área fue eludido por Patito, quien se sacó de encima también al paraguayo Salustiano Candia y disparó, pero apareció el boliviano Ronald Raldes para evitar la conquista sobre la línea.
En la segunda etapa Independiente cometió el error habitual de replegarse para intentar aprovechar el contraataque y le permitió así reaccionar a Colón que en un intento aislado consiguió el descuento por intermedio del Bichi Fuertes.
Se hizo entonces un juego de ida y vuelta y el Sabalero hasta pudo haber empatado, aunque sin merecerlo.
A los 32 minutos Joaquín Larrivey desaprovechó lo que pudo haber sido la igualdad y, a los 38, Parra metió un tiro en el poste derecho que pudo haber precipitado la tranquilidad roja. Recién a los 41 el oportunismo de Silvera cerró el triunfo de Independiente y acabó con el suspenso.
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