miércoles, 25 de mayo de 2011

HALLAZGO CIENTÍFICO EN BRASIL

1,80 METRO DE LONGITUD EN MINAS GERAIS

Encuentran al abuelo de los cocodrilos terrestres

Midiendo 1,80 metro, de la punta del hocico al final de la cola, el Campinasuchus Dinizi no encaja muy bien en la definición de monstruo prehistórico. Aún así parece haber sido un excelente fundador de la dinastía.
 Según sus descubridores, el bicho es el integrante más primitivo del grupo de cocodrilos que dominó el interior de Brasil en la era de los dinosaurios.

Sus descendientes lo doblarían de tamaño y se volverían los predadores dominantes del clima semiárido que cubría São Paulo, Minas Gerais y otros territorios del país hace mucho mucho tiempo.
 
El Campinasuchus Dinizi acaba de ser presentado a la comunidad científica en un artículo de la revista especializada Zootaxa
 
Sin embargo, se trata solo del comienzo del trabajo. El lugar donde ocurrió el descubrimiento de la especie, en Campina Verde (Minas Gerais), todavía está repleto de material óseo para investigar.
 
“Parece que allí hubo una serie de mortandades en masa a lo largo del tiempo”, dijo Luiz Carlos Borges Ribeiro, investigador de la Universidad Federal del Triángulo Minero y uno de los responsables de describir el bicho.
 
Los cadáveres de la especie podrían haberse acumulado durante sequías prolongadas, cuando los cocodrilos habrían buscado los pocos lugares con agua que quedaban, para enterrarse en el barro. En el caso de los ejemplares encontrados, no fue tan exitoso.
 
“La densidad de material en Campina Verde es impresionante. Por el momento todos son Campinasuchus, pero puede ser que haya otras especies por allá”, cuenta Borges. 
 
A pesar de haber buscado el barro como habitat en el momento de la crisis meteorológica, los integrantes de la especie eran totalmente terrestres.
 
Las patas, bastante más erguidas que las del cocodrilo actual, le daban gran movilidad a los animales en tierra firme, haciendo que, en la acción, ellos se asemejaran mucho más a los leones que a los yacarés, según el equipo del Centro de Investigaciones Paleontológicas Price.
 
Poco a poco, modelos detallados del esqueleto animal, hecho en espuma floral (normalmente usada en macetas) ayudan a reconstruir la postura del bicho.
 
Los datos están siendo transferidos a un programa de animación 3D. La intención de los científicos es recrear en video el descubrimiento, a partir de lo encontrado, los huesos fosilizados, hasta escenas en que el Campinasuchus “vuelve a la vida” como si ellos fuesen imitadores de Steven Spielberg.

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