LATINOAMÉRICA
Chile redobló sus esfuerzos en el reclamo a la Argentina para que extradite al guerrillero terrorista Galvarino Apablaza, quien se refugia en nuestro país desde hace 10 años.
Este martes, la delegación chilena de visita en la Argentina volvió a solicitar que se anule el asilo político concedido durante los años de gobierno kirchnerista.
La voz del reclamo la llevó el ministro de Interior chileno, Jorge Burgos.
"Cada vez que venga algún ministro chileno a alguna visita va a ser un tema. Todo el mundo sabe que está presente, porque el interés de Chile es de más de una década", dijo al salir del encuentro.
Los funcionarios chilenos fueron recibidos por Marcos Peña y Rogelio Frigerio
La llegada de Mauricio Macri al poder dio esperanzas a Chile de destrabar un reclamo que lleva más de diez años: la extradición del ex guerrillero del Frente Patriótico Manuel Rodríguez acusado en su país de haber sido el autor intelectual del asesinato del senador Jaime Guzmán y participante del secuestro del empresario de medios Jorge Edwards.
El 14 de septiembre de 2010, la Corte Suprema de Justicia de la Argentina revocó un fallo de primera instancia del juez Claudio Bonadio y resolvió la extradición de Apablaza a Chile.
Apenas unos días después, la Comisión Nacional de Refugiados (Conare) del gobierno de Cristina Kirchner le concedió el estatus de asilado y frenó su expulsión del país.
Ahora, el gobierno de Chile reclama que el asilo político sea anulado y se cumpla con la sentencia del máximo tribunal de Justicia argentino.
"El interés de Chile es de más de una década, es que se pueda dar cumplimiento a la sentencia de la Corte Suprema que liberó una orden de extradición para que cumpla la sentencia con que fue juzgado en Chile", recordó Burgos.
El reclamo fue parte de la agenda que la delegación chilena trajo para tratar en la reunión de trabajo en Casa Rosada. Burgos estuvo acompañado por el ministro Consejero, Ricardo Hernández, el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, y el embajador de Chile en el país, José Antonio Viera-Gallo.
Por el lado argentino participaron el jefe de Gabinete, Marcos Peña; el ministro del Interior, Rogelio Frigerio; el embajador argentino en Chile, José Octavio Bordón; el director nacional de Migraciones, Horacio García, y el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo.
El macrismo ya mostró su predisposición a revisar el caso Apablaza, pero aún si decide intentar revertir la cuestión, no le será tan sencillo anular el estatus de refugiado de Apablaza: los acuerdos internacionales, las leyes argentinas y las diferentes instancias judiciales podrían demorar esa posibilidad por varios años.
En los últimos días, el Ministerio de Justicia solicitó a distintas áreas del Poder Ejecutivo que le envíen toda la información que tengan sobre el caso para analizarla y definir una posición oficial.
El tiempo le juega en contra: el próximo 23 de febrero el país debe responder a una demanda iniciada por la familia Guzmán ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
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