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| Foto Fabián Gastiarena |
El equipo de Coudet igualó 1-1 con Olimpo y es el único líder de la Zona 1 con 18 puntos, uno más que Godoy Cruz que visitará el domingo a Vélez.
Por GABRIEL BERMÚDEZ
Rescató un empate Rosario Central en su visita a Olimpo de Bahía Blanca y, con el punto, el equipo rosarino quedó en soledad en la punta de la tabla a la espera de que juegue Godoy Cruz.
En un partido de mucha fricción, los dirigidos por Coudet no pudieron desplegar su juego característico y no logró doblegar a un rival que jugó mucho tiempo con un futbolista menos.
La lluvia, el campo rápido y las dimensiones de la cancha invitaban a un juego atractivo, intenso, con llegadas y situaciones de gol. También, por las mismas condiciones, estaba el riesgo de la pierna fuerte, de la fricción. Y sucedieron ambos aspectos en la primera parte.
Porque ya se sabe a qué juega el Rosario Central de Eduardo Coudet, con dos delanteros, un enganche y dos volantes externos de vocación ofensiva, y porque Olimpo lejos de asustarse por la idea del rival salió a plantarse cara a cara.
No hubo situaciones de riesgos en los instantes iniciales, apenas un remate de Walter Acuña que contuvo Manuel García. Pero iban, venían y entusiasmaban. Hasta que Juan Quiroga se hizo expulsar de manera infantil y el partido se quebró. Iban 14 minutos.
Así, apareció lo otro: las patadas. El árbitro Néstor Pitana mostró diez amarillas y una roja en la etapa inicial. Se puede poner en duda la primera amonestación de Quiroga, aunque la segunda también podría haber sido roja. El lateral izquierdo llegó tarde y cruzó muy fuerte a Giovani Lo Celso.
La incidencia hizo que Cristian Díaz modifique su idea: Jacobo Mansilla se paró de defensor y los delanteros retrocedieron. Y le quedó demasiado larga la cancha a Acuña y compañía. Pese a la ventaja numérica, Central no tuvo lucidez para manejar la pelota. Tal vez las condiciones climáticas influyeron.
Lo cierto es que solamente inquietó con un centro de Franco Cervi que casi mete en contra Ezequiel Parnisari y con un tiro libre de Alejandro Donatti que resolvió bien Nereo Champagne.
En la segunda parte se profundizó lo que sucedió en la etapa inicial. Con las mismas armas fue Central a quedarse con la punta en soledad, aunque el local desplegó más jugadores en las contras. Y la audacia de Olimpo tuvo su premio: luego de un centro de Pizzini, Nicolás Figal conectó de cabeza y puso el 1-0 parcial.
Con un hombre menos el elenco bahiense daba el golpe. Igual, quedaban 25 minutos. No lo pudo aguantar Olimpo.
Coudet mandó a todos a atacar y también metió cambios ofensivos. Ya el local no tenía espacios ni fuerzas para la contra; entonces, ocurrió lo que se presumía: el empate.
Otra vez Marco Ruben anotó. El delantero no necesita tener un gran partido para festejar, aunque las cosas se le facilitan con un compañero como Lo Celso. El juvenil enganche habilitó al atacante para la igualdad. Para el final, solo quedó tiempo para la expulsión de Damián Musto. www.clarin.com
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