Cristina Fernández de Kirchner ya está a bordo del avión que la traerá a Buenos Aires y se mostró de buen humor antes del despegue. "Estoy muy bien, tranquila, por qué no debería estarlo", afirmó a Clarín en un breve diálogo. Con un perrita sobre la falda y sentada en el asiento 4D de la clase turista, la ex mandataria posó para una selfie con un turista francés, al que le preguntó si le había gustado el glaciar Perito Moreno.
A su lado, en el avión, se ubicaron sus secretarios y el jefe de su custodia, los únicos que la acompañaron en todo momento y cargaron las dos valijas negras con las que llegó al aeropuerto a las 18:35.
Al ser consultada por Clarín por la declaración que deberá dar el próximo 13 de abril ante el juez Bonadio por la venta de dólar futuro, la expresidenta señaló estar tranquila. "¿Por qué no debería estarlo?", se preguntó, mientras acariciaba a Lola, su perrita, caniche mini toy, que también voló con ella el 10 de diciembre de 2015, cuando dejó el poder y se recluyó en Santa Cruz.
Su llegada al aeropuerto de El Calafate fue caótica. Todo se desarrolló en medio de un desborde del operativo de seguridad que fue sobrepasado por la convocatoria para despedir a CFK. La ex jefa de Estado no se detuvo a saludar a la gente.
Vestida con un chal blanco, maquillada y con el pelo suelto, subió rápidamente al segundo piso del aeropuerto, desde donde saludó a los militantes que le cantaba parte del cancionero de La Cámpora.
MARCHA DE DESPEDIDA
Más temprano, en la puerta de su casa, hubo una marcha de apoyo. A las 15.30 se escucharon algunos bocinazos en apoyo a Cristina Kirchner, y en la plaza que se ubica en diagonal al acceso principal de su residencia en El Calafate vecinos y militantes se reunieron para acompañar a la ex Presidenta hasta el aeropuerto local, donde abordará el vuelo 1893 de Aerolíneas Argentina hacia Capital Federal.
La movilización para despedir a CFK fue tranquila, pero por momentos la tensión se apoderó del lugar, cuando vecinos forcejearon con periodistas, sobre todo de televisión, para no dejarlos filmar.
"Esto no es para la televisión, esto es para el pueblo", les dijeron mientra obstrían sus cámaras con banderas.
La convocatoria la realizó La Cámpora El Calafate para las 16. Un importante número de vecinos se acercaron a la rotonda Los Gauchos esperando que Cristina Kirchner se despidiera de ellos antes de dejar su "lugar en el mundo", para regresar a Buenos Aires donde el miércoles declarará ante el juez Claudio Bonadio en la causa que investiga la venta del dólar futuro.
"Ella estuvo siempre, vos tenés que estar" fue la consigna utilizada por las redes sociales para convocar a los vecinos de la villa turística y realizar una caravana en respaldo a Cristina. Sobre la calle Tehuelche una fila de vehículos de acomodó desde temprano, a la espera de la salida de la ex Mandataria.
En el acceso principal de su chalet permanecieron dos camionetas de la custodia durante la tarde ultimando los detalles para la salida de Cristina. Diego Carbone jefe de la custodia, es el responsable de las últimas decisiones para el traslado hacia el aeropuerto. (www.clarin.com)
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