En un acto de "ordenamiento administrativo", y en medio de la fuerte tensión que existe al interior de la Policía Bonaerense, la gobernadora María Eugenia Vidal le quitó a dicha fuerza el manejo discrecional de dos cajas millonarias: las "Horas Polad” y la Verificación Policial de Vehículos (VPV).
Las horas Polad son básicamente los adicionales que se pagan a los efectivos por el trabajo extra en seguridad en partidos de fútbol, cuidado de los edificios públicos, bancos, transporte de caudales y centros comerciales.
Hasta ahora, la Bonaerense directamente decidía asignar la cantidad de efectivos y luego enviaba las liquidaciones al ministerio de Seguridad para el pago de las labores extras.
Sobre este procedimiento pesaban fuertes sospechas de que se agregaban efectivos que nunca cumplieron esos servicios, con una recaudación que quedaría 'para los jefes'.
Por ejemplo, se llegó a asignar un agente cada 20 personas en los partidos de fútbol, lo que generó la queja de dirigentes por el costo y porque aseguran que iban "muchos menos policías de los que pagábamos".
A partir de esta resolución, las autoridades policiales ya no podrán de decidir sobre el destino de los dineros enviados en materia de las horas Polad, y será el propio ministerio de Seguridad, que conduce Cristian Ritondo, el que dirija administrativamente la distribución.
Con respecto a la Verificación Policial de Vehículos, la periodista María Eugenia Duffard informó en Telenoche que se detectaron irregularidades en la distribución de horas extra y que hay un faltante de dos millones de pesos por el pago del trámite de VpV.
Cabe recordar que Vidal emprendió una reforma de la Policía Bonaerense, que incluyó una purga de 70 comisarios y subcomisarios por hechos de corrupción (el número de desplazados podría superar los 200).
Además, la semana pasada unos 1.000 funcionarios de alto rango de la policía bonaerense fueron intimados para que en 10 días presenten sus Declaraciones Juradas de Bienes, ya que al vencer el plazo fijado no cumplimentaron ese trámite dispuesto por la gobernadora.
Ritondo dispuso la intimación a esos efectivos advirtiendo que si volviesen a incumplir se procederá a suspenderlos, descontarles del salario los días en que demoren en efectuar la presentación, y serán denunciados ante la Unidad de Información Financiera (UFI) por el posible lavado de activos.
Desde que comenzó dicha reforma en la Bonaerense, se registraron algunos mensajes intimidatorios hacia Vidal.
Por ejemplo, en el último mes, dos miembros fueron descubiertos en su despacho por la madrugada y revisando cajones de los escritorios. Por el hecho los dos policías fueron removidos de su cargo, junto al jefe de la custodia de Vidal.
Además, el ministro de Gobierno bonaerense, Federico Salvai, fue víctima del amedentramiento cuando irrumpieron en su residencia oficial en La Plata y revolvieron armarios, escritorios y cajones.
Por su parte, el intendente de la capital provincial, el macrista Julio Garro, también recibió visitas de la bonaerense en su domicilio personal. Los efectivos ingresaron en la casa que el Jefe Comunal posee en el country Grand Bell al día siguiente que la Gobernadora anunciará la obligatoriedad de las declaraciones juradas de los policías.
También fue baleado el frente del ministerio de Salud, hecho que no descartan que pertenezca a la misma saga
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