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Estudiantes cortan calles nuevamente en Santiago

Con cortes de calles, derribo de semáforos e incendio de colectivos, grupos de estudiantes han tomado por asalto las calles de Santiago nuevamente. La policía arrojó bombas lacrimógenas y disparos al aire para dispersar a grupos de encapuchados que actuaron simultáneamente en varias comunas del Gran Santiago. Los estudiantes piden becas para el 60% de los estudiantes más pobres.

Con barricadas, incendio de un colectivo y cortes de tránsito se inició esta mañana en distintos puntos de la capital chilena la primera jornada de paro convocada por el movimiento estudiantil, que hace cinco meses exige educación pública gratuita y de calidad.

La policía arrojó bombas lacrimógenas y disparos al aire para dispersar a grupos de encapuchados que actuaron simultáneamente en varias comunas del Gran Santiago, donde se ubican emblemáticos centros educacionales.

La movilización está programada para hoy y mañana, e incluye asambleas, cacerolazos y cortes de calle, entre otras actividades, según reseñaron Ansa, DPA y diarios chilenos.

Por otra parte, los dirigentes educacionales entregarán hoy en el palacio de La Moneda (sede del gobierno) los resultados finales del Plebiscito Nacional por la Educación, realizado el viernes y sábado pasado, y en el que participaron 1,5 millones de personas, que se pronunciaron mayoritariamente (88,8%) por el fin del lucro con fondos públicos en la educación.

"Sería un gran paso si se becara los estudios universitarios del 60 por ciento más pobre", dijo en ese marco el rector de la Universidad de Santiago, Juan Manuel Zolezzi, a radio Cooperativa.

Hasta ahora, sin embargo, el diálogo entre estudiantes y gobierno está quebrado, debido a que la última oferta de la autoridad es otorgar becas sólo al 40% de los universitarios más pobres.

Las autoridades autorizaron para mañana dos de las cuatro marchas estudiantiles y el vocero de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios, Rodrigo Rivera, sostuvo que hay un compromiso para que Carabineros "no interfiera" en el desarrollo de la movilización.

"De antemano rechazamos cualquier acto de violencia de parte de cualquier sector que quiera infiltrarse en esta marcha, y al final empañar lo que son las actividades de la gran mayoría de la ciudadanía en general que hoy día está apoyando el movimiento" , dijo Rivera.

En la emblemática avenida Alameda, manifestantes colocaron barricadas encendidas a las afueras de las universidades de Chile y de Santiago mientras que la policía intentaba despejar la vía con carros lanza-agua, según imágenes difundidas por televisoras locales.

Asimismo, estudiantes ocuparon la avenida Macul en el barrio de Ñuñoa, donde lanzaron bombas molotov a agentes policiales que respondieron con carros lanza-agua y agentes químicos, mientras que un bus del transporte público fue incendiado por encapuchados en la avenida Grecia de la misma comuna, según radio Cooperativa.

La policía chilena no entregó un saldo de detenidos o heridos. Las barricadas provocaron un severo caos vehicular en la hora punta de la mañana, con interminables atascos en las principales avenidas de Santiago.

“Sabemos que la violencia no refleja lo que es el movimiento y sabemos que resta, pero debemos hacernos el cuestionamiento de por qué se realiza este nivel de protesta” , dijo Camila Ballesteros, una de las líderes del movimiento estudiantil, a la televisora Canal 13.

Para este martes, los estudiantes anunciaron un gran ’caceroleo’ nocturno, mientras que el miércoles realizarán dos marchas por el centro de Santiago.

Los estudiantes protestan en contra del sistema educativo heredado de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y han realizado una treintena de movilizaciones que en su mayoría han acabado con disturbios y enfrentamientos con la policía.