miércoles, 14 de marzo de 2012

ARGENTINA

Mendoza: Marcharon de 3 mil personas por el crimen de un joven

Masiva marcha en Mendoza en reclamo de inseguridad.-


MENDOZA (Los Andes) Más de tres mil personas se manifestaron esta tarde frente a la Legislatura en reclamo de justicia por el crimen de Matías Quiroga (21), asesinado el viernes pasado en el intento de asalto a un blindado en Godoy Cruz. Cuando se estaban desconcentrando, cientos de manifestantes que reclamaban justicia por otros casos de asesinatos a manos de delincuentes golpearon a un policía que custodiaba el edificio legislativo e intentaron entrar a los golpes al recinto. 


La multitud se concentró en San Martín y Garibaldi y desde allí marchó a la Casa de las Leyes para exigir a las autoridades que se esclarezca el hecho. 

Un conmovedor e intenso aplauso invadió el clásico lugar de concentración de las manifestaciones en Mendoza cuando compañeros de ráfting y amigos de Matías Quiroga llegaron al lugar con sus remos en alto. Los aplausos se reanudaron con más fuerza cuando, minutos después, Osvaldo “El oso” Quiroga se sumó a la marcha. Allí, entre gritos que reclamaban justicia, el padre de la joven víctima recibió el respaldo y cariño de la gente.

Los remos fueron abriendo paso por la Peatonal, donde los clientes de bares y restaurantes se sumaron al reclamo aplaudiendo de pie. 

Sin banderas políticas pero con carteles que recordaban a las víctimas de la inseguridad, los manifestantes hicieron oír su reclamo con aplausos y señales de ánimo para el padre, Osvaldo Quiroga, la madre, María Inés, su hermano Tomás y el tío de Matías. 

Un mar de gente acompañó a los padres de Matías, que trataron de conservar el orden y el respeto en todo momento, sobre todo cuando los manifestantes comenzaron a agraviar al vicegobernador, Carlos Ciurca, y al ministro de Seguridad, Carlos Aranda, que los recibieron en la puerta de la Legislatura. 

Allí, micrófono en mano Osvaldo Quiroga inició un emotivo y vivaz discurso, interrumpido a veces por gritos de solidaridad, aplausos y hasta pedidos de pena de muerte para los delincuentes. 

"Quiero agradecer a ustedes que nos acompañan en este momento tan duro. Muchas gracias", dijo entre lágrimas Quiroga al comenzar su discurso. “Vengo a decirles que estamos solos frente a este flagelo que nos está matando cada vez más rápido”, siguió el afligido hombre mientras debía detenerse ante los cerrados aplausos. 

“Me han preguntado qué haría si tuviera a los culpables acá”, continuó Quiroga, mientras algunos le respondían “¡Matarlos!”. “Pero los culpables a lo mejor no fueron los que tiraron del gatillo. Acá lo que pasa es que la gente que participó en este hecho, como en otros tantos, esos señores habían estado ya en la cárcel y ya salieron”.

“¡Estamos hartos del famoso tema de los Derechos Humanos! Solamente decimos ‘pena de muerte’ y el tema es que quizás no vamos a saber a quién matar. ¿Saben cuánta gente de esa enorme cantidad de agrupaciones de Derechos Humanos con esas subvenciones millonarias del Estado la llamaron a mi esposa y a mí? ¡Nadie!”, bramó Quiroga desde los escalones de la Legislatura provincial. 

“Me reciben el vicegobernador y el señor ministro, intentó seguir Quiroga, pero una serie de chiflidos e insultos se lo impidió por un largo momento. “Por ellos me enteré de que hay toda una oficina de gente que cobra para atender el tema de los Derechos Humanos. Nadie lo dice, pero ¿los Derechos Humanos de quién? ¡Porque Matías ya no los tiene! Esta gente está para los Derechos Humanos de ya sabemos quién y no sirvió porque nos siguen matando a los chicos que realmente sirven a esta comunidad y a este país”, señaló el padre de Matías, visiblemente molesto y con una mezcla de tristeza e impotencia dominando su voz.

Y añadió: “Lejos está en mí el querer ofender a alguien. Pero cuando cae muerto algunos de esos hay 400 de estos que cobran por los Derechos Humanos pidiendo a ver si en la cárcel le van a dar un almohadón más fino o más grueso y cuando no tiene mayonesa el sándwich lo queman. Por eso nosotros, los que realmente sostenemos esta comunidad, debemos decir de una vez por todas: ¡basta, basta, basta!”. 

Ciurca y Aranda siguieron atentamente el discurso de los Quiroga, detrás de ellos y debieron soportar estoicamente los reclamos de la gente que colmaba la Peatonal Sarmiento. Con esa presión, el Vicegobernador firmó ante el público el petitorio que los padres de Matías le entregaron.

El escrito incluye tres ítems, entre los que se destacan el pedido de publicación de los datos de funcionarios judiciales que deciden sobre los beneficios que tienen algunos condenados y la posibilidad de formar una comisión integrada por familiares de la víctima de violencia y la inseguridad y autoridades para que entre todos puedan trabajar para combatir la delincuencia en Mendoza. 

Otros padres de víctimas de la delincuencia se unieron al reclamo frente al edificio legislativo, recordando a sus seres queridos con carteles. Ellos también escucharon reclamos a favor de la pena de muerte en castigo por crímenes como el de Matías, quien fue ultimado de un balazo por un delincuente para robarle el auto y huir del frustrado atraco a un camión de caudales.

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