Por ARMANDO ROCHA / U24
El encuentro fue bochornoso, pobrísimo, lamentable y hasta grosero, si uno se anima a seguir agregando calificativos a este empate de River 0-0 con Flamengo de Brasil que correspondió al cierre del Grupo D de la Copa Libertadores de América 2018. Con la paridad, el ‘Millonario’ quedó como líder con 12 puntos.
Más allá del resultado del partido, River hizo negocio con el marcador en blanco porque ya no tenía nada que perder pero defraudó ante los miles de hinchas que se congregaron en el estadio Monumental para ver, por lo menos, una victoria, aunque sea, por mínima diferencia.
A pesar de este espantoso espectáculo, el arquero Franco Armani no defraudó ya que controló pelotas fáciles, no tuvo demasiado trabajo y ahora podrá ir tranquilo a concentrar con la selección para ir al Mundial de Rusia 2018.
Por otro lado, el elenco de la ‘Banda Roja’ desembarcó en este compromiso con una racha invicta de 16 partidos y una remontada de buenos resultados que incluyeron 11 triunfos desde aquella final que le ganó a Boca 2-0 en Mendoza por la Supercopa Argentina, el 14 de marzo. River y Flamengo igualaron 2-2 en la primera fecha de la Copa Libertadores, en Río de Janeiro.
El encuentro se jugó sin público en el estadio olímpico Nilton Santos y no en el Maracaná, que estaba suspendido por incidentes en la final de la Copa Sudamericana frente a Independiente. Durante los primeros ’90, los comandados por Marcelo Gallardo dieron la impresión de que podían golpear de entrada con las embestidas de Ignacio ‘Nacho’ Fernández y Marcelo Saracchi.
No obstante, los de Núñez se fueron replegando y le cedieron terreno al ‘Fla’ con las situaciones creadas por Lucas Paquetá, Henrique Dourado y Éverton Ribeiro. De ahí, el encuentro se fue apagando a causa de que los dos equipos cometieron groseros errores en el mediocampo e intentaban sacar provecho de sus propias deficiencias.
En medio de la maraña de imprecisiones, River, buscó, pero sin éxito, rearmar la línea media, en tanto, no gravitaba en el medio Exequiel Palacios y todo el equipo dependía de lo que hacía Lucas Pratto.
Además, el elenco riverplatense se mostró confuso, sin dinámica y sin aceleración en el ritmo de juego. La segunda etapa se suponía que tanto River como Flamengo se arriesgarían a atacar o mostrar intenciones para romper el tanteador en cero: nada de eso ocurrió.
Salvo un estupendo remate de media vuelta de Ignacio Scocco que pasó desviado y no llevó peligro al arco defendido por Diego Alves, las acciones no tuvieron ningún cambio y otra vez el partido cayó en un profundo pozo en el que abundaron las imprecisiones a raíz de la falta de ímpetu de River y Flamengo.
La decadente actuación de ambos combinados le sumó las tarjetas amarillas para Paquetá, Enzo Pérez y Jonatan Maidana por faltas infantiles.
Ante el pésimo nivel futbolístico, los entrenadores de ambos equipos, Marcelo Gallardo y Mauricio Barbieri, echaron mano al banco de suplentes.
En el último minuto, el recién ingresado Rodrigo Mora en el ‘Millonario’ le habilitó un formidable pase a Rafael Santos de Borré que descargó un tiro de media volea que pegó en el travesaño de Alves.
Finalmente, ninguno de los dos hizo méritos para sacar un resultado satisfactorio y merecieron retirarse antes de tiempo por la deprimente exhibición.
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